AMLO, Rosario: confusión y ambigüedad

Desde la redacción de @loscabareteros ponemos a su consideración la “Columna de columnas nacional” del martes 18 de septiembre de 2018. AMLO: ¿del “golpe de realidad” al pesimismo?: Tal vez conforme se acerque la fecha del arranque, irá aterrizando en la realidad y tratando de disminuir, con diagnósticos crudos pero también realistas, las enormes expectativas que su triunfo y sus propuestas despertaron en la mayoría de los votantes. El discurso de AMLO sobre Robles destantea a los analistas. Las contradicciones de Andrés…

Rayuela

Esta capital, sedienta de justicia, mirará con lupa las acciones de sus gobernantes y legisladores.

El discurso de AMLO sobre Robles destantea a los analistas: añade confusión y ambigüedad

En el portal SinEmbargo, Efrén Flores, explica la confusión que generó López Obrador entre tirios y troyanos con sus recientes declaraciones: “Las recientes declaraciones del Presidente electo Andrés Manuel López Obrador, acerca de que los actos de corrupción en la Sedesol y Sedatu, exhibidos bajo la gestión de Rosario Robles, son “un circo” y que ella es “un chivo expiatorio”, han provocado una serie de reacciones negativas en la opinión pública que ponen en entredicho una de las máximas de su campaña: acabar con la corrupción en México. Politólogos consultados por SinEmbargo coincidieron en que si en dos años no vemos avance en casos emblemáticos de procuración de justicia como lo son Ayotzinapa, Odebrecht, la Estafa Maestra, entre otros, su credibilidad y la de su movimiento tocarán fondo. Alargar el pacto de impunidad que vivimos con las pasadas administraciones priistas y panistas sería una completa “traición” a los electores que confiaron en Andrés Manuel, dijeron. “No habrá una cuarta transformación mientras la impunidad sea la madre de todos los problemas del país”, explicó el doctor Juan Luis Hernández, director del Departamento de Ciencias Sociales de la Universidad Iberoamericana Puebla. Para Enrique Toussaint, politólogo de la Universidad de Guadalajara, AMLO “comete un error muy claro al confundir dos cosas. Una es no utilizar la justicia a tu favor y otra es no castigar casos que todo indica son actos de corrupción”.

Las contradicciones de Andrés

Raymundo Rivapalacio en El Financiero enfatiza las contradicciones en el discurso de López Obrador: “Andrés Manuel López Obrador sigue acumulando contradicciones que lo hacen impredecible e indescifrable. Pronuncia discursos que contradicen sus propias palabras, hace aseveraciones que después cambia radicalmente y apoya lo que después condena o al revés. Sus afirmaciones suelen carecer de sustento y muchas veces son tan confusas que incluso entre sus seguidores está generando extrañeza y deslindes. Ya no es un Presidente electo que está en el proceso de presentarse como el futuro gobernante de todos los mexicanos, sino un político mercurial sin un eje sólido, que cambia en función de factores desconocidos. ¿Estados de ánimo? ¿Mayor conocimiento de cómo están las finanzas públicas frente a sus promesas de campaña de repartir dinero? ¿Empieza a entender que el entorno externo sí impacta lo interno? El domingo fue uno de esos días donde mostró no tener claras las cosas. En su gira de agradecimiento dijo, en Tepic, que le iban a entregar un país en bancarrota, cuando días antes había señalado que el país que recibiría se encontraba sin crisis, con estabilidad financiera y social. El alegato del país en bancarrota le sirvió para lavarse las manos sobre lo que podría venir en el primer año de su gobierno. Muchas promesas hizo a millones de mexicanos, que esperan el primero de diciembre como la fecha mágica donde cambiarán sus vidas. Ante la realidad de que el tesoro que creía estaba en las arcas de la Secretaría de Hacienda no existe, porque nunca existió, responsabilizó al Banco de México de que si las cosas no alcanzan para lo que prometió, será culpa de su política financiera. A sus seguidores no les va a importar que la política financiera es responsabilidad del gobierno, de nadie más. ¿Pero qué pensarán en el Banco de México del Presidente electo? ¿O su presidente, Alejandro Díaz de León, que platicó con él la semana pasada? (…) Las decisiones presidenciales determinan el destino de una nación, para bien o para mal. El método empleado será la diferencia entre el bienestar nacional o que se paguen las consecuencias de una mala decisión. No son pocos los que empiezan a compararlo con el presidente Donald Trump, aunque se parece más a George W. Bush, conocido por su forma mesiánica e intuitiva de tomar decisiones. López Obrador aún no gobierna. Tiene tiempo para que encuentre la claridad que requerirá al sentarse en la silla presidencial”.

AMLO: ¿del “golpe de realidad” al pesimismo?

Luego de ganar la elección, Andrés Manuel López Obrador enviaba mensajes a la ciudadanía de armonía y esperanza, de cara a la transformación simbolizaba eventual, llegada a los pinos, sin embargo en días recientes hubo un repentino cambio de visión sobre la realidad en que se encuentra el país. Por ello en El Universal, Salvador García Soto, escribe que: “el optimismo que había mantenido desde que ganó las elecciones y el discurso de la ‘esperanza’ que transmitía la promesa de cambio de la llamada Cuarta Transformación, el Presidente electo pasó de golpe a un duro diagnóstico sobre el estado de la República que recibirá su administración al hablar ahora de una nación ‘en bancarrota’ y con crisis graves en materia económica, social y de seguridad que le dificultarán cumplir todo lo que la sociedad demanda, aunque sí garantiza lo que prometió en campaña […]. ¿Qué cambió en 10 días para que López Obrador haya modificado radicalmente la visión que expresó hace un par de semanas cuando aseguró que en el país que recibiría del gobierno de Peña Nieto había estabilidad y no crisis ni económica ni política? […] El giro en la percepción es radical y desata críticas y comentarios no sólo entre sus opositores, sino entre analistas y especialistas financieros que cuestionan el uso de un término tan duro y específico como la ‘bancarrota’, que significa una situación de ‘quiebra económica, de ruina y de hundimiento y descrédito de un sistema o doctrina’. Y se puede coincidir con el diagnóstico en parte, si se revisan aspectos como el magro e insuficiente crecimiento económico de los últimos 30 años que él alude por el modelo neoliberal, o si se revisan las cifras de violencia actuales, pero sin restarle gravedad a las dificultades económicas y sociales, hablar de una nación en ‘bancarrota’ remite más a una situación de crisis financiera extrema que él mismo había negado días atrás. No es la primera vez que en Morena hacen un diagnóstico catastrófico sobre el estado en el que recibirán al gobierno y al país. Ya lo habían dicho en el Congreso, tanto Ricardo Monreal como Mario Delgado, líderes de las mayorías del Senado y la Cámara, cuando hablaron de ‘un país en grave riesgo y con situaciones muy complicadas” o de una “casa en ruinas y muy sucia, aunque la pinten de blanco”. Pero hasta ahora López Obrador había mantenido un discurso menos catastrofista y más esperanzador […]. Tal vez conforme se acerque la fecha del arranque, irá aterrizando en la realidad y tratando de disminuir, con diagnósticos crudos pero también realistas, las enormes expectativas que su triunfo y sus propuestas despertaron en la mayoría de los votantes que le dieron un respaldo histórico en las urnas, para que al final el aterrizaje en la realidad entre lo deseable y lo posible no sea tan duro ni tan decepcionante para la ‘esperanza de México”.

AMLO: ¿regresó el candidato?

Enrique Quintana en El Financiero, escribe sobre los cambios en el discurso de López Obrador: “La economía mexicana no está en bancarrota, como bien lo sabe y lo ha dicho el propio López Obrador. La afirmación anterior viene a cuento por lo dicho por AMLO en el sentido de que “el país lleva 30 años de bancarrota”, cuando el domingo arrancó en Tepic su gira de agradecimiento. Tan no es esa la opinión que ha sostenido AMLO, que en una participación que tuvo ante los empresarios agrupados en CAINTRA, en Monterrey, el pasado 4 de septiembre, dijo lo siguiente: “Hay problemas, es público, es notorio. Pero también se ha logrado que la transición se esté dando en armonía, con estabilidad, no hay crisis política. No tenemos una crisis financiera, no nos está pasando lo que está sucediendo en Argentina”. En declaraciones como la realizada en Monterrey, apareció como presidente electo. Pero en las de Tepic, al volver a la plaza pública, los templetes y las porras, entró en escena de nueva cuenta el candidato. Después de lo dicho, le han llovido las críticas de todos los sectores. Sin embargo, si se lee el discurso completo, pueden encontrarse las referencias que quería dar AMLO. Alude a la producción de petróleo. El reporte más reciente indica que se producen actualmente en México 1.84 millones de barriles al día. La última ocasión que nuestro país produjo ese volumen fue por allí en 1980, hace 38 años. Otra variable que tiene también niveles sin precedente es la que refleja la violencia. El número de muertes violentas por día ha rebasado todos los registros que se tienen documentados. También aludió al número de pobres. De acuerdo con el Coneval, en su más reciente cálculo, hay 53.4 millones, una cifra que es menor en 900 mil personas a la que se tenía en 2014, pero que, efectivamente, supera los 49.5 millones de 2008, cuando empezó a usarse la actual metodología de medición. Lo peor es que en medio de las frases tronantes, se perdió el foco al compromiso reiterado de prudencia fiscal. AMLO insistió en que su gobierno no gastará más allá de lo que los ingresos de la hacienda pública permitan. Quizás por esta razón, AMLO también dijo en su discurso que probablemente no podría cumplir con todo lo que se le ha demandado, sino sólo con aquello que ha ofrecido. También repitió, como lo ha hecho en diversas ocasiones, que será respetuoso de la autonomía del Banco de México… pero agregó que si algo salía mal, habría que voltear hacia el exterior o a las políticas del banco central, y no al gobierno. Es decir, se trató de un discurso que hubiera sido positivo para los inversionistas y los mercados, si no hubiera tenido ese tono de crítica generalizada y sin fundamento respecto a la situación económica y financiera del país. Ayer, aparecieron voces por aquí y por allá, que cuestionaron con toda justeza el juicio tajante de AMLO. Ni un bajo crecimiento económico –como sin duda lo hemos tenido– es un desastre, ni tampoco el nivel de la deuda pública –que creció en esta administración– equivalen a una bancarrota del país. Ojalá que en esta gira que está realizando AMLO por el país y que hoy lo va a llevar a Guadalajara, quien hable sea el presidente electo, que arrasó en las elecciones, y que ha demostrado en diferentes ocasiones, ponderación y serenidad. No convendría al país escuchar nuevamente al candidato, que hace juicios sumarios y al que encienden los vítores y las masas.

El judicial no es un poder sexenal

La política de austeridad que ha promovido desde su campaña, el Presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, y los partidos que lo respaldaron en la coalición, incluye la reducción de los salarios de altos funcionarios públicos, así como la eliminación de diversas prestaciones y “privilegios”. Este tema sigue causando polémica. En Milenio, el periodista Carlos Marín, escribe que: “el coordinador de la bancada morenista en el Senado, Ricardo Monreal, patina con el cuento de que ‘un gran número de funcionarios’ del Poder Judicial tiene ‘una gama de ingresos y beneficios’. Y como ve ‘la emergencia económica que vive la nación’, pidió ‘un auténtico ejercicio de autorreflexión (sic) y moderación'[…]. No le basta la reducción de 850 millones de pesos a la Suprema Corte porque ignora o desdeña que el total de ahorro suma mil millones, pues el PJF incluye a la Judicatura y el Tribunal Electoral federales. La remuneración de juzgadores y consejeros […], establece el 94 constitucional, ‘no podrá ser disminuida durante su encargo’, ya que su tarea requiere de la alta especialidad que contempla el artículo 127. Eso quiere decir que su paga bien puede sobrepasar el absurdo tope salarial del Presidente de la República impuesto por Felipe Calderón y refrendado por Andrés Manuel López Obrador”.

Morena toma el Congreso

Las recientes acciones de Morena en el Congreso que han encendido las alertas, es lo relacionado con el Manuel Velasco. En Milenio, Héctor Aguilar Camín, escribe que: ”el Congreso es el primer poder en funciones del futuro gobierno. Sus maneras iniciales deberían prender un foco de alerta. Si así de impositivo y apresurado va a ser el nuevo gobierno, empezará a cumplir muy pronto los peores augurios que se han hecho sobre su talante autoritario […] Morena tiene hoy una bancada de 252, uno más que lo necesario para tener sola, sin sus aliados, la mayoría absoluta en la Cámara. ¿Cómo lo hizo? Con una negociación ajena al voto recibido de los electores. Pidió a sus simpatizantes electos con las siglas del PT y del PES que se cambiaran formalmente de casaca, y se hicieran parte de la bancada de Morena. Hecho esto, le faltaban 5 diputados para obtener la mayoría absoluta (250 +1). Encontró a esos cinco en el Partido Verde, quien se los cedió a cambio de no sabemos qué, aparte del sainete parlamentario que le autorizó a Manuel Velasco, gobernador con licencia de Chiapas y senador electo por Chiapas, que pudiera tener licencia como senador recién electo para volver a su cargo de gobernador con licencia que le guardaba un gobernador interino puesto y quitado por él, para terminar su periodo de gobierno de tres meses, transcurridos los cuales volverá al Senado. El resultado neto de la maniobra es que con 37 por ciento de los votos Morena se quedó con más de 50 por ciento de las curules y con la mayoría absoluta en la Cámara de Diputados. Lo que se llama completar la voluntad popular […]. Lo que se llama liderato y lo que se llama disciplina”.

La disputa por las presidencias en el Senado

Otro de los temas interesantes respecto a los legisladores morenistas es el reparto de las comisiones, por lo que en El Universal, Bajo Reserva, asegura que: “los grupos parlamentarios del Senado alcanzaron un acuerdo en el reparto de comisiones legislativas, que al parecer —dicen— deja a todos satisfechos. Ese fue el primer paso, el fácil, porque el que sigue, nos hacen ver, será un verdadero desafío, pues ahora a cada grupo parlamentario le tocará elegir a su Presidente de comisión. En Morena, la disputa ha comenzado desde hace unas semanas. Nos mencionan que la maestra Delfina Gómez pidió mano para presidir Educación; el senador Armando Guadiana para Energía. Lo cierto es que él único que tiene presidencia asegurada es Héctor Vasconcelos para Relaciones Exteriores, por el acuerdo político que hizo con el líder máximo de Morena, Andrés Manuel López Obrador, quien lo había designado canciller y luego tuvo que dejarle su lugar a Marcelo Ebrard, acción que le ganó el apoyo presidencial para encabezar en el Senado la Comisión de Relaciones Exteriores. Así que quitando esa, haga sus apuestas para ver quiénes logran una presidencia de comisión”.

AMLO: salarios, seguridad y generales

Luego de su triunfo en la elección, Andrés Manuel López Obrador comenzó una gira de agradecimiento que lo llevará a recorrer todo el país. Pero más allá de dar las gracias, AMLO tiene previstos otros objetivos. En Excélsior, Jorge Fernández Menéndez, escribe que: “le servirá para consolidar, sobre todo, el poder en cada uno de los estados. En esta gira, el Presidente electo estrena a su equipo de seguridad, una instancia a todas luces insuficiente para las exigencias de un Presidente de la República. En el transcurso de los días y sobre todo cuando asuma el próximo primero de diciembre, comprenderá la importancia de contar con un Estado Mayor Presidencial […] que lo proteja […]. Más allá de eso, el recorrido tendrá tres objetivos muy claros. Por una parte, consolidará la base de poder que ha logrado Andrés Manuel en todos los estados. […]. Para realizar cualquier reforma constitucional, además de hacerla aprobar con mayoría calificada en diputados y senadores, necesita la aprobación de por lo menos 17 legislaturas locales. Ése es el poder estatal que López Obrador necesita afianzar […]. Y, finalmente, le servirá para refrendar el apoyo popular que tuvo el primero de julio y que le permite gozar de las actuales mayorías. Comienza la gira después de sacar en San Lázaro la Ley Federal de Remuneración de Servidores Públicos que establece que ninguno puede ganar más que el Presidente, una vieja promesa de campaña de Andrés Manuel […]. En realidad, lo que tendría que ser importante en el gobierno, dejando fuera abusos o excesos, es la eficiencia del gasto gubernamental más que los salarios en sí mismos. De poco sirve tener funcionarios públicos que cobren menos si su trabajo es ineficiente o si no están preparados para afrontarlo. Muchos de sus colaboradores lo saben, pero el tema de la disminución salarial es algo tan arraigado en el futuro mandatario que es difícil convencerlo (como ocurre con el tema de la seguridad) de que acciones que se ven como políticamente correctas terminan siendo potencialmente peligrosas o ineficientes”.

AMLO cazará coyotes

Este repentino cambio en la visión de AMLO ha tenido diversas repercusiones, pues en El Universal, su Editorial, Bajo Reserva, asegura que: “muchas asociaciones y agrupaciones, principalmente campesinas, han comenzado a entrar en pánico porque les han hecho saber que en el próximo gobierno no habrá recursos que pasen por sus manos. Nos comentan que varias asociaciones buscan reunirse con el Presidente electo Andrés Manuel López Obrador, quien ha declarado que no habrá intermediarios para la entrega de recursos a campesinos y será a través del Bansefi que se canalizarán los recursos federales de manera directa a los beneficiarios. Así que todo indica que en diciembre el gobierno de AMLO abrirá la temporada de caza de coyotes”.

Un viaje sin mapas de rutas precisas

En Milenio, Carlos Marín, escribe que el nuevo congreso está tomando decisiones sin tener conocimiento de algunos temas, por lo que comenta que: “un razonamiento se basa en premisas que, si son falsas, llevan a conclusiones y acciones equivocadas […]. Algo así ocurre con lo que va de la cuarta transformación que arrancó con el nuevo Congreso. Los principales cuadros morenistas vienen presentando síntomas de alergia a lo sensato y razonable. En su reclamo al Poder Judicial, donde imagina se vive en la ‘opulencia, con ‘excesos y privilegios’, no sabe que, a diferencia de otros altos servidores públicos, jueces, magistrados y ministros no disponen de escoltas o aeronaves; que vuelan en líneas comerciales pagando sus boletos cuando viajan a sus lugares de origen; que no tienen viáticos ni comitivas numerosas (a lo más un par de auxiliares) ni casas de descanso, gimnasios, peluquerías o algo por el estilo. Tan errado Ricardo Monreal, pero cómo no si cuando, en el colmo de los pésimos diagnósticos, Andrés Manuel López Obrador dice que el México ‘sin crisis financiera” de hace 10 días hoy está ‘en bancarrota…”.

Distraídos

Por otro lado en el Excélsior, Frentes Políticos, asegura que: “Lorenzo Córdova, consejero Presidente del INE, dijo que ‘algunos partidos políticos’ no han entregado los cuadernillos utilizados en los comicios del pasado 1 de julio, material que incluye la Lista Nominal, por lo que serán sancionados. Enfatizó que todos los partidos están obligados a devolver el material 10 días posteriores a la elección. ‘El INE no debe permitir que estas normas no se cumplan’, además, recordó que las veces que se ha presentado fuga de información de los datos contenidos en el Padrón Electoral, el INE no ha sido el responsable, sino algún partido político. Que señale a los culpables”.

El congreso de Morena

Parece que en Congreso existe una prisa por aprobar las propuestas que desde su campaña anunció Andrés Manuel López Obrador, al grado de dejar de poner atención a ciertos detalles. Al respecto en Milenio, Héctor Aguilar Camín, escribe que: “los congresistas de Morena traen tanta prisa como su Presidente electo. Han empezado a caminar rápido y a mostrar que si algo quieren es ejercer el poder que tienen. Los diputados pasaron de inmediato una minuta de ley para que nadie gane más que el Presidente. Una minuta que, bien leída, representa una masacre para los sueldos de la administración pública federal: una cirugía con machete. La minuta es de 2011, al parecer escrita por Pablo Gómez, y dormía en el refrigerador del Congreso. Fue descongelada y votada el mismo día. Luego de leída, el mismo día, generó 40 reservas de parte de otros tantos legisladores, entre ellos muchos de Morena […]. Una celeridad parlamentaria digna del Poder Ejecutivo. Días antes el Presidente del Senado, Ricardo Monreal, desahogaba otra esgrima entre legisladores locales hidalguenses, todos de Morena, con el Congreso y el gobierno de Hidalgo. Según los legisladores morenistas no les reconocían su verdadero peso electoral en las posiciones y comisiones del Congreso de Hidalgo. Según Monreal, los legisladores inconformes habían iniciado un procedimiento de desaparición de poderes en Hidalgo, decisión que constitucionalmente solo el Senado puede ejercer y que creo que no se ha ejercido nunca, desde las épocas del presidente Luis Echeverría, que desapareció poderes precisamente en Hidalgo. Dijo Monreal a los medios que iba a hablar con el gobernador para que se arreglara con los diputados porque si el procedimiento de desaparición de poderes se iniciaba, ya no lo podía detener. De modo que a los días de iniciadas las labores en el Senado había ya en el aire, la insinuación, la advertencia, si se quiere la amenaza, de que el Senado morenista juega al beisbol con pelotas de piedra: una política de alertas y consecuencias máximas. El nuevo gobierno no tiene muy claras las cifras ni la viabilidad de muchos de sus grandes proyectos. Lo que tiene muy claro es cómo se absorbe y se ejerce el poder”.

PRI y PAN en el rin

En una analogía con el encuentro de boxeo sucedido el pasado sábado en Las Vegas entre ‘El Canelo‘ y Golovkin” en El Universal, Carlos Loret de Mola, escribe que: “terminaron una pelea en donde se dieron con todo y ambos salieron francamente golpeados, con sangre en el rostro y moretones por doquier. Uno de los dos ganó, sí, pero el costo que pagaron fue alto. El campeón vigente no supo ni cómo perdió sus cinturones y el rival que no termina de convencer resultó favorecido apretadamente. Al final, el más beneficiado con el espectáculo que dieron fue alguien que ni sudó. Se puede hablar así de ‘Canelo‘, Golovkin y el público que presenció una gran pelea de box el sábado por la noche. También aplica para el PAN, el PRI y Morena. En el PAN la historia de traiciones no termina. El cuarto de guerra de Ricardo Anaya […] está fracturado: Marko Cortés dejó de seguir al pie de la letra las órdenes de Anaya, el hombre que lo volvió figura nacional al convertirlo en coordinador de sus diputados, y emprendió una discreta rebelión que lo llevó a negociar con los gobernadores del PAN […] y con los grupos más conservadores del partido. El resultado: una trifecta en la que Cortés apunta a la dirigencia nacional, Héctor Larios a la Secretaría General y Rafael Moreno Valle a la Coordinación de los panistas en el Senado, con el sacrificio de Damián Zepeda, una de las figuras centrales del anayismo […]. En el PRI también reverencian al principal factor de la derrota: el Presidente Enrique Peña Nieto. Por respeto a la investidura del ‘primer priista’, han decidido no moverse, no emprender ninguna restructuración real, no hacer nada hasta que no termine el sexenio. Valiente oposición: en el PAN saben que los hundió la división interna, pero siguen peleándose; en el PRI saben que los hundió el gobierno de Peña Nieto, pero siguen a sus órdenes. Algún pensador dijo bien que el sentido común es el menos común de los sentidos. Mientras tanto, el lopezobradorismo avanza sin oposiciones y se desenvuelve como gobierno en funciones aun cuando le faltan dos meses y medio para tomar formalmente el poder. Con esa oposición tan debilitada, que no parece se vaya a reponer de la golpiza pronto, el escrutinio, evaluación y en su caso contrapeso del gobierno entrante descansará solamente en la cada vez más robusta sociedad civil y en los medios de comunicación”.

Lucha en el senado

Por su parte en Milenio, Trascendió, asegura que: “la negociación de comisiones se ha atorado en el Senado por la paridad de género y por las suplencias que tendrá Morena a partir del 1 de diciembre, cuando la ministra Olga Sánchez Cordero, Alfonso Durazo y Germán Martínez, entre otros, dejen su escaño para irse al gabinete. La idea es que los tres presidan comisiones de inmediato, como Justicia, Seguridad Pública y Salud, pero el problema será cuando se vayan, pues sus suplentes no tienen la misma formación y, por ejemplo, en el caso del lugar que dejará la próxima secretaria de Gobernación es evidente para muchos que Jesusa Rodríguez no podría llevar los trabajos del área de justicia, una de las más importantes y que tendrá que dictaminar la Fiscalía General, entre otros temas”.

@loscabareteros