2022, ¿La segunda alternancia?

«El proceso electoral de 2022 empieza a mostrar algunos indicadores de que será un ejercicio álgido en el que habrá pocas condiciones de construir acuerdos para transitarlo, tanto al interior de los partidos, de las eventuales coaliciones, así como entre los contrincantes, la polarización de las posiciones actuales, sin duda, en vez de aminorar se fortalecerán.

La administración estatal tiene todas las características de un sexenio perdido, quien gane la gubernatura recibirá un estado más endeudado y con una problemática acumulada, el gobernador Aispuro entregará un Durango en peores circunstancias de cómo lo recibió, difícilmente podrá hacer que varíe esta percepción en estos últimos meses»: Ernesto Escobosa.

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