Con el gobernador Rosas Aispuro convertido en un lastre para el PAN y sus aliados, en Durango ya se cocinan las candidaturas para sucederlo.
Se prevé una reñida competencia entre las coaliciones Morena-PT-PVEM y PRI-PAN-PRD, quizas encabezados ambos por expriistas. Pero esos bloques pueden resquebrajarse: el senador José Ramón Enríquez impugnó el resultado del proceso interno de Morena, en tanto que el PRI y el PAN se disputan la desiganación del abanderado de Va Por Durango.
De acuerdo con las primeras encuestas, dos politicos de estirpe priista disputarán la gubernatura del estado el próximo 5 de junio, en unas elecciones en las que además están en juego 39 presidencias municipales.
Morena va en alianza con PT y PVEM, en tanto que el PAN intenta retener el poder uniendo fuerzas con PRD y PRI, al que derrotó hace seis años rompiendo la histórica hegemonía priista en la entidad.
Aunque los procesos internos todavía no concluyen y los candidatos oficiales serán nombrados entre el 23 y el 28 de febrero, según el calendario electoral local, en ambas alianzas ya se perfilan los aspirantes.
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