La presión social como mecanismo para hacer que los gobernantes cumplan sus promesas

Ciudadanos le exigen a Aispuro que cumpla sus promesas

Un día después de que iniciaran las manifestaciones frente al edificio de Pemex en Durango, el gobernador Aispuro acudió a «escuchar» a los manifestantes y quizás, mostrarles empatía, decirles que estaba con ellos, presumir -igual que todos los gobernadores de la República- que se reuniría con los miembros de CONAGO y el secretario de Hacienda, vaya usted a saber qué es lo que pretendía el gobernador.

¿Quién se lo aconsejó? Su grupo de asesores, seguramente. ¿Sintió que el «bono» ciudadano con el que llegó al Gobierno -ya desgastado, por cierto- le bastaba para tranquilizar a los manifestantes? Creo que sí.

Pero al gobernador le salió «el tiro por la culata», además de no lograr calmar a los manifestantes, fue increpado por un joven que le mostró una imagen donde el entonces candidato prometía eliminar la tenencia y el replaqueo y le exigía que cumpliera su promesa.

El vídeo se hizo viral en redes sociales y los comentarios de ciudadanos decepcionados por el «cambio» abundaban por todos lados, fueron cientos, miles de comentarios.

Fue entonces que la presión social de un vídeo que se esparció como pólvora, obligó al gobernador Aispuro a cumplir su promesa y anunciar en conferencia de prensa que se eliminaba el cobro del replaqueo y la tenencia.

En el evento dijo ser un gobernador «sensible», qué bueno, pero le faltó reconocer el papel que la presión social jugó para que le aflorara la «sensibilidad». No pretenderá que creamos que lo hizo nomás por que sí y no por la presión, ¿verdad?

El logro de que cumpliera su palabra no fue de él, que ya estaba acorralado, fue de la gente que le exigió porque ya está harta -estamos hartos- de políticos que creen que los ciudadanos tenemos que pagar las consecuencias de su incapacidad para administrar los recursos del Estado sin hacer ningún gesto, ninguna queja, apechugando y aguantando estoicamente.

Reconozco, igual que muchos ciudadanos, que haya recapacitado y decidido cumplir su palabra, pero reconozco aún más a los ciudadanos que levantan la voz, que exigen lo que merecen, esos que no son conformistas, que están dispuestos -y lo hacen- a romper el status quo porque ellos sí quieren -queremos- un verdadero cambio.

@untalrentería