“Mientras en el resto del país la percepción de inseguridad promedio se mantuvo estable (incluso bajó ligeramente 0.2 puntos), lo de Durango es una caída excepcional. De hecho, este aumento de 12.8 puntos fue el tercer incremento más acelerado de las 91 ciudades evaluadas en todo México”
Los ciudadanos de Durango tienen razón: vivir en la capital es cada vez más inseguro. No se trata de una exageración ni de una percepción aislada; es una realidad alarmante que los datos oficiales acaban de confirmar de la manera más contundente. La tranquilidad en nuestra ciudad se está perdiendo a pasos agigantados, y los números son la prueba irrefutable.
La Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU) del INEGI, en su reporte de octubre 2025, enciende todos los focos rojos para nuestra entidad.
El dato central es preocupante: en solo tres meses, la percepción de inseguridad en la ciudad de Durango dio un salto dramático. En junio de 2025, el 36.8% de la población se sentía insegura. Para septiembre, esa cifra se disparó hasta alcanzar el 49.6%. Hablamos de un incremento de 12.8 puntos porcentuales en un solo trimestre.
Pongamos esto en un contexto claro y simple: de un día para otro, Durango pasó de tener a 1 de cada 3 ciudadanos sintiéndose inseguro, a tener a 1 de cada 2. Es un deterioro brutal en la calidad de vida y en el incremento del miedo.
Este desplome no es una tendencia nacional. Mientras en el resto del país la percepción de inseguridad promedio se mantuvo estable (incluso bajó ligeramente 0.2 puntos), lo de Durango es una caída excepcional. De hecho, este aumento de 12.8 puntos fue el tercer incremento más acelerado de las 91 ciudades evaluadas en todo México.
La mancha de inseguridad se expande. La zona de La Laguna (que incluye Gómez Palacio y Lerdo) no se queda atrás y también registró un alza significativa de 6.3 puntos en el mismo periodo.
Y no solo es sentir miedo, es vivir el conflicto. La misma encuesta revela que la población que experimentó conflictos o enfrentamientos directos en Durango también aumentó, pasando de 33.3% a 40.7%.
Estos datos de la ENSU, confirman los resultados de la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (ENVIPE) 2025, publicada el pasado 19 de septiembre. En este reporte anual, Durango se posicionó como la tercera entidad con el mayor incremento en su tasa de víctimas de delito entre 2023 y 2024, con un alarmante aumento del 23.5%. Aún más preocupante es el dato de la tasa de incidencia delictiva (número de delitos por cada 100 mil habitantes), donde nuestro estado ocupó el segundo lugar nacional con un incremento del 54.9%, solo superado por Oaxaca. Para una entidad con una población relativamente pequeña, este salto es devastador y evidencia un deterioro acelerado en la seguridad.
Los números no mienten. Algo se rompió en Durango durante los últimos meses. Este aumento acelerado no es una estadística más para el archivo; es una emergencia que exige acciones inmediatas, claras y efectivas por parte de las autoridades. No podemos acostumbrarnos a que la mitad de la población viva con miedo.
La credibilidad de la administración actual va en picada porque no se trata solo del asunto de la seguridad.
Leonardo Álvarez / @leon_alvarez



