Desde la redacción de @loscabareteros ponemos a su consideración la “Columna de columnas nacional” del jueves 25 de enero de 2018. Una campaña del PRI sin priístas… Mano negra en el PRI: a diferencia de 2006 y 2012 López Obrador cuenta ahora con una ayuda inesperada, una mano negra muy escondida que sólo puede perfilarse de manera circunstancial: Miguel Ángel Osorio Chong. SHCP: la fábrica de sátrapas…
Rayuela
A los políticamente correctos les parece bien que un presunto cómplice del asesinato de Miroslava sea secretario particular del gobernador Corral.
http://www.jornada.unam.mx/2018/01/25/
Una campaña del PRI sin priístas
Desde que iniciaron con las precampañas políticos, el único de los precandidatos presidenciales que no utiliza personajes representativos de su partido, en este caso del Partido Revolucionario Institucional durante sus actos de campaña es por la razón de que no es priísta, con tal de mantener su imagen de candidato “ciudadano”, situación que no les está gustando en las altas esferas del partido pues, parecería que solamente están utilizándose mutuamente sin obtener beneficios reales ninguna de las dos partes, y sobre el tema, en El Universal, el periodista Salvador García Soto, escribe que: “la queja se escucha cada vez más, tanto en las cúpulas como en la estructura del Partido Revolucionario Institucional: en la campaña de su candidato presidencial, José Antonio Meade, hay de todo menos priístas. […]. Y es que las bases, sectores y organizaciones del Partido Revolucionario Institucional en la campaña de Meade no tienen, hasta ahora, injerencia ni participación en la estrategia de campaña y sólo son usadas ‘para la foto’ y para llenar eventos con el candidato en los estados que visita. […]. Un reflejo del poco peso que está teniendo el Partido Revolucionario Institucional y sus liderazgos en la campaña presidencial de su precandidato es la nula actividad que se observa en la sede priísta de Insurgentes Norte. El Comité Ejecutivo Nacional se ve sin movimiento, demasiado tranquilo para estar en marcha las elecciones más grandes de la historia. Nadie del equipo cercano de Meade opera en las instalaciones del partido y mucho menos tiene oficinas ahí. […]. Personajes como Alejandra Sota, Javier Lozano y Julio di Bella, se cuentan entre los panistas con más peso e influencia en la campaña del Partido Revolucionario Institucional que los propios priístas. Mientras se presume la adquisición de cuadros blanquiazules, se les garantizan candidaturas y se les muestra junto al candidato, a los políticos del viejo partido, expertos en operación electoral, se les hace de lado, como si el candidato quisiera alejarse lo más posible de cualquier cosa que lo ligue a la desgastada marca tricolor. Si a la percepción de distanciamiento del candidato externo hacia el partido que lo postula, se le suma que no parecen haberse resuelto ni cicatrizado las pugnas y diferencias entre las cúpulas del Partido Revolucionario Institucional y miembros del gabinete como el canciller Luis Videgaray […], la conclusión es que la maquinaria del viejo Partido Revolucionario Institucional, la que se supone impulsará y apuntalará a su primer candidato no priísta, no está jalando y eso se refleja en el estancamiento y las dificultades de José Antonio Meade para salir del tercer lugar en el que lo colocan la mayoría de las encuestas serias. Ya se sabe que con Meade, Peña y su grupo político apostaron a sumar votos y adhesiones de la sociedad civil, más allá del voto duro priísta, como una condición necesaria para aspirar a ganar está complicada elección. Pero algo tendrá que hacer el ‘ciudadano’ candidato para que los priístas no sientan que los está desairando o haciendo a un lado, porque el dinosaurio también es susceptible. […]”.
http://www.eluniversal.com.mx/columna/salvador-garcia-soto/nacion/una-campana-del-pri-sin-priistas-0
Mano negra en el PRI
Raymundo Rivapalacio escribe en El Financiero que: “a diferencia de 2006 y 2012 López Obrador cuenta ahora con una ayuda inesperada, una mano negra muy escondida que sólo puede perfilarse de manera circunstancial. Esa mano es del derrotado Miguel Ángel Osorio Chong, aunque no hay forma de probar si el respaldo que está teniendo López Obrador o la demolición de las posibilidades del PRI en las elecciones de julio, se está dando de manera directa o indirecta. Osorio Chong está muy callado y en Los Pinos el presidente Enrique Peña Nieto dejó de hablar con él. (…) Las actitudes de Osorio Chong, extrañas y dañinas para el candidato presidencial, se comenzaron a dar desde antes de definirse la nominación, pero en los días en que el entonces poderoso secretario de Gobernación percibía que sus posibilidades de suceder a Peña Nieto estaban liquidadas. El mensaje fue la escisión del Partido Encuentro Social, que nació, creció y se alimentó de Bucareli y el Grupo Hidalgo, hacia la cancha de Morena. Osorio Chong fue requerido para que lo evitara, pero el dinero mediante el cual persuadirían a los líderes del partido cristiano a mantenerse aliados del PRI, nunca llegó a sus destinatarios. Desde entonces, todo lo cercano a él, se ha ido separando del PRI o de los intereses estratégicos del partido. El último ejemplo es el rompimiento de René Fujiwara Montelongo, uno de los dos nietos más queridos de la maestra Elba Esther Gordillo. La familia de la maestra, que cayó en desagracia y en la cárcel a principios del gobierno de Peña Nieto, había recibido cobijo político de Osorio Chong. Gordillo siempre ha pensado que la traición a sus contribuciones a la campaña de Peña Nieto, era del entonces secretario de Hacienda, Luis Videgaray, respaldado por el exjefe de Oficina de la Presidencia, Aurelio Nuño, quienes convencieron al Presidente de que la reforma educativa no iba a ser posible con la maestra en medio. Fujiwara Montelongo y su padrastro, Fernando González, que chocó con Nuño cuando se estaba construyendo la reforma educativa, se sumaron esta semana formalmente a la campaña de López Obrador. Paralelamente a ellos, poco visto en los medios de comunicación, fue la renuncia de más de seis mil perredistas de Hidalgo que se fueron en masa a Morena, así como haber apoyado completamente a Roberto Albores Gleason –respaldado igualmente por Nuño y el presidente del PRI, Enrique Ochoa–, para ser candidato de la alianza PRI-Partido Verde en Chiapas, que provocó un estallido político en aquél estado donde, en este momento, no se sabe cómo va a terminar de procesarse. La mano negra de Osorio Chong se encuentra también detrás del gobernador de Chihuahua, Javier Corral, a quien apoyó fuertemente, que ha arrinconado al Presidente, al gobierno y al PRI, con la acusación del desvío de 250 millones de pesos del erario estatal a campañas priistas en 2015 y 2016. De manera creciente, dentro de las estructuras de poder del PRI, existe la creencia de que el expediente que vincula al exgobernador César Duarte al exlíder del PRI, Manlio Fabio Beltrones, y al exsecretario de Hacienda, actualmente de Relaciones Exteriores, Luis Videgaray, le fue entregado a Corral por instrucciones de Osorio Chong. De esta forma, dijeron priistas, se deshizo de Beltrones, quien podría haberle disputado la coordinador del PRI en el Senado durante la próxima legislatura, golpeó a Videgaray, ante quien perdió la carrera presidencial, y a través del eslabón más débil, Duarte, escala ese caso potencialmente a Luis Vega, el secretario de Finanzas y Administración del PRI, por cuyas manos circula todo el dinero de las campañas del partido, y que es incondicional del presidente Peña Nieto”.
http://www.elfinanciero.com.mx/opinion/mano-negra-en-el-pri.html
La fábrica de sátrapas
Jorge Zepeda Patterson, escribe, en El País que: “¡Chihuahua! Es una exclamación que algunos mexicanos usan para expresar sorpresa, entusiasmo o molestia. Justo las reacciones que Chihuahua y su gobernador están provocando en el país en su cruzada en contra del Ministerio de Hacienda y el uso faccioso y electoral de los recursos fiscales. Durante años creímos que los gobernadores corruptos eran resultado de la caída del presidencialismo y la descentralización, de la ausencia de contrapesos. En su primer año Javier Corral, gobernador de Chihuahua, ha mostrado que en realidad los abusos de estos sátrapas regionales fueron producto de un diseño político y financiero orquestado desde la federación para apoyo del PRI nacional y sus campañas. En el fondo no fue la descentralización del poder sino la sofisticación de la centralización lo que dio lugar a estos abusos. (…) Lo de Javier Corral en Chihuahua ha sido distinto a otras entidades. El gobernador panista no sólo enfiló las baterías en contra de su antecesor priista, César Duarte, un ladrón donde los haya, sino también contra la estructura federal que provocó las corruptelas. El enfoque de Corral es correcto; hasta ahora todas las «vendettas» se han limitado a los operadores materiales, sin abordar al sistema financiero diseñado desde el centro para prohijarlos. Ahora se ha puesto en evidencia que la proliferación de abusos de los gobernadores no fue resultado de la descentralización de los poderes (algo que habíamos tomado como un subproducto de la caída del régimen presidencialista) sino el fruto de una estrategia financiera diseñada desde el centro y, en última instancia, destinada a favorecer al centro. El ramo 23, una partida presupuestal ambigua y hasta cierto punto discrecional, existe desde los años ochenta pero adquirió niveles astronómicos recientemente (en 2016 ejerció el equivalente a poco más de 12.000 millones de dólares). Mediante el simple recurso por parte de Hacienda de subestimar sus ingresos del año siguiente, logra canalizar a este rubro montos que superan el presupuesto de varias secretarías. Y, más importante, incluye la partida de proyectos para el desarrollo regional que si bien se asigna desde las Cámaras (de allí que se le conozca como la partida de «los moches») es la Secretaría de Hacienda la que los aplica y les da seguimiento. En la práctica una enorme «bolsa chica» que el Gobierno federal y, ahora está visto, sus operadores políticos ejercen de manera discrecional y de cara a los intereses electorales y facciosos del PRI nacional. Corral ha puesto en evidencia el puente financiero que se estableció entre funcionarios de Hacienda, de la tesorería de Chihuahua y del comité nacional del PRI para hacer llegar a ese partido recursos originalmente destinados a aquella entidad. Por desgracia no fue una excepción. Parte de los delitos que se imputan a los ex gobernadores de Sonora, Quintana Roo o Veracruz, se presume, fueron orquestados por la misma vía. La denuncia que ha hecho Javier Corral ha sido un torpedo en la línea de flotación de Hacienda; un ministerio que se suponía se manejaba con criterios técnicos y al margen de la alternancia política. Y la respuesta de estos financieros a la acusación ha sido por demás reveladora y torpe: detuvieron en represalia la asignación de recursos del ramo 23 a Chihuahua. Y tampoco es que hubieran detenido mucho, desde que llegó Corral la entidad ha recibido 61 millones de pesos; los otros estados un promedio de 1,023 millones. El gobernador de Chihuahua ha emprendido una marcha política a la Ciudad de México en demanda de las partidas que la federación ha retenido a su Administración. Su lucha es importante, pero lo que verdaderamente está en juego es la corrupción política endémica que nunca debió invadir al sistema hacendario de nuestro país. Esperemos que el desenlace de esta marcha sea algo más que un cheque de muchos dígitos.”
https://elpais.com/internacional/2018/01/24/actualidad/1516833975_352478.html
AMLO, en lógica de gobierno
Aunque el proceso electoral sigue en las precampañas, hay precandidatos como Andrés Manuel López Obrador que ya piensa más como un gobernante y no como un precandidato, en La Jornada, el periodista Julio Hernández López, escribe que: “Andrés Manuel López Obrador ya está pensando en cómo gobernar, más que en la precampaña interna de Morena o en la venidera campaña en sí y las consecuentes elecciones. […]. Ese brinco en la categorización política […] ha generado explicables críticas y desconcierto, no sólo entre los segmentos tradicionalmente adversos al peculiar tricandidato sino inclusive, de una manera nunca antes vista, entre un segmento de sus seguidores. No será necesario esperar a que López Obrador llegase a Palacio Nacional para enterarse de retrocesos, incongruencias y oportunismos. […]. Y ahora, con esta activación del modo gobierno, López Obrador ha tomado desbalanceados a sus adversarios, que apenas están ajustando sus equipos de campaña, con PPMid tratando de pasar de la agresividad matraquera que le habían impuesto a una faceta más de reconciliación, e intentando armar su propio equipo ejecutivo […] para no estar dependiendo de Aurelio Nuño y de Enrique Ochoa Reza, y con Ricardo Anaya dedicado a la musicalización de sus mensajes y a la promoción de su imagen como niño bueno, aunque sin propuestas de fondo. En este momento es mucha la distancia política entre Andrés Manuel López Obrador y sus persecutores ahora provisionalmente divididos, Meade y Anaya. En estos días recientes, para bien y para mal, el tabasqueño ha puesto sobre la mesa mediática los asuntos a discutir, mientras el priísta y el panista no han logrado posicionar ni siquiera algunas de sus propuestas más elaboradas […]. Por lo pronto, López Obrador actúa ya tratando de conciliar intereses y grupos, como se debe hacer desde el gobierno. Pronto habrá un congreso sobre educación convocado por Morena al que concurrirán los disidentes del oficialismo, los gordillistas desplazados y algunos representantes de la dirección sindical charra que encabeza Juan Díaz. Otra decisión de gobierno fue la tomada para que la senadora Gabriela Cuevas sea ahora candidata a una diputación federal segura, para que continúe como presidenta de la Unión Interparlamentaria. […]”.
http://www.jornada.unam.mx/2018/01/25/opinion/008o1pol?partner=rss
La feria de las ocurrencias disfrazada de precampaña
Los precandidatos presidenciales se han encargado de decir muchas ocurrencias desde que iniciaron las precampañas, muchas cosas son sin dejar claro cómo las van a conseguir, o que por lo increíblemente funcionales que parecen, se duda de ellas mismas por esa razón, y ayer, José Antonio Meade habló de combatir la corrupción, siendo que dentro del partido que hoy representa, se han encargado sistemáticamente de detener todo proceso que busque combatirla, y sobre ese tema, en Milenio, el periodista Carlos Puig, escribe que: “es curioso, ayer José Antonio Meade presentó un plan anticorrupción en la manera de diversas iniciativas de ley. Digo que es curioso porque hoy el país que quiere gobernar, el gobierno del partido al que él representa, sin militar, es el que obstaculizó y tiene parada la implementación real del Sistema Nacional Anticorrupción. Es del gobierno del que los consejeros ciudadanos del sistema se han quejado hasta hartarse. Digo que es curioso porque él, creo que con alguna razón, al principio de su campaña, dijo que no podíamos reinventar el país cada seis años. Por cierto, hace unos años, cuando candidatos y funcionarios estatales y legisladores se apuraban a entregar su tres de tres al Imco, Meade se alineó a las órdenes de Los Pinos y no la presentó. Ahora quiere una ‘certificación patrimonial’, cualquier cosa que eso quiera decir. […]. El punto número uno de la plataforma del Frente de Ricardo Anaya en el capítulo anticorrupción es: establecer una campaña nacional en favor del establecimiento de un genuino estado de derecho y de combate a la impunidad, como mecanismos para favorecer nuestra democracia, la seguridad, la inversión, la creación de empleos, la calidad de vida y la marca país, entre otros. No, pues ya estuvo. En seguridad andamos en las mismas. Que si las amnistías, que si con darle trabajo a los jóvenes, que si más guardia nacional de militares, que si con educar a los jóvenes, que si ahora sí, de verdad, vamos a ir tras el dinero. […]. Dicen que es porque son precampañas, que si esto apenas comienza, que si la ley, que si… Tampoco hay tanto tiempo, nuestra ley bizarra los va a silenciar muy pronto. Y creo que dadas las condiciones del país, para las ideas no hay calendarios”.
Voto útil
En lo últimos procesos electorales, en México se ha hablado del “voto útil”, que pueden significar ganar o perder por un margen estrecho la elección. El “voto útil” es tomar la decisión de votar por el candidato que más opciones tenga de ganar. En Excélsior, su director, el periodista Pascal Beltrán del Río, escribe que: “ya es lugar común decir que en las elecciones presidenciales en México […], una buena proporción de los votantes suelen concentrar sus preferencias en dos de las candidaturas en la boleta, en detrimento de las demás. Lo hacen incluso renunciando a su primera opción para apoyar a alguna de las dos que tienen mayores posibilidades de ganar. Es lo que se ha dado en llamar ‘voto útil’. Es decir, el que deposita en la urna pensando que no tiene caso sufragar por un aspirante que no tiene mayores posibilidades de ganar. […]. Por ejemplo, en la elección de 2000, la diferencia entre los sufragios obtenidos por Vicente Fox y los que se depositaron a favor de los candidatos al Senado de la Alianza por el Cambio (PAN-PVEM) fue de un millón 791 mil votos, equivalentes a casi cuatro puntos porcentuales. Esa vez, sus dos principales contrincantes, Francisco Labastida y Cuauhtémoc Cárdenas, perdieron votos respecto de los aspirantes al Senado de su propio partido. El primero perdió 115 mil sufragios y el segundo, 767 mil. […]. En 2006 también parece haberse dado el llamado voto útil. La diferencia con los comicios anteriores es que la resta de los votos para Presidente y para senadores no benefició a sólo uno de los candidatos sino a tres de los cinco que compitieron. El más favorecido no fue el ganador de la contienda, el panista Felipe Calderón, sino el segundo lugar, el perredista Andrés Manuel López Obrador, quien sacó más del doble de presuntos sufragios útiles (dos millones 463 mil contra un millón 111 mil de Calderón). También los obtuvo Patricia Mercado, de Alternativa Socialdemócrata (341 mil), mientras que el priista Roberto Madrazo y el panalista Roberto Campa perdieron dos millones 320 mil y un millón 275 mil, respectivamente. […]. En 2012, el priista Enrique Peña Nieto habría obtenido 688 mil votos útiles y López Obrador, dos millones 244 mil. Los otros dos candidatos, la panista Josefina Vázquez Mota y el panalista Gabriel Quadri tuvieron menos sufragios que los aspirantes al Senado de sus respectivos partidos. Ella, 387 mil y él, 699 mil. Un dato que puede explicar la diferencia son los dos millones 755 mil votos nulos en la elección de senador contra el millón 236 mil en la elección presidencial (más de millón y medio de diferencia). Sin datos más precisos, es muy difícil saber cómo se expresa el voto útil, si realmente existe. Y hay algo más a tomar en cuenta: entre 2000 y 2012, la diferencia entre el primer y tercer lugar de la elección presidencial pasó de 30 puntos porcentuales a 12.52. Tal vez eso indique que el elector está cada vez menos dispuesto a abdicar de su preferencia original y sufrague por su candidato favorito, aun a sabiendas de que perderá”.
http://www.excelsior.com.mx/opinion/pascal-beltran-del-rio/2018/01/25/1215893
¿Nueva esclavitud?
Los avances tecnológicos, de manera general, han traído beneficios para muchos sectores de la población pues facilita las actividades que se desarrollan en la vida cotidiana. En el Reforma, el analista y periodista Sergio Sarmiento, escribe que: “al salir de una conferencia sobre tecnología en el Foro Económico Mundial me encontré, en el baño de un hotel, un cartel que decía: ‘voluntaryenslavement.com. El rápido desarrollo de la tecnología reduce la diversidad y la libertad’. Al entrar a la página de internet sobre ‘esclavitud voluntaria’ encontré argumentos que denunciaban que la tecnología es culpable de la sobrepoblación, la dependencia electrónica, la vigilancia masiva, la erosión de la intimidad, la extinción de especies, la carrera armamentista, el aumento de las necesidades de energía, la contaminación, las enfermedades del estilo de vida y el uso excesivo de los recursos naturales, entre otros males. La página concluye: ‘Si valoramos la libertad y la diversidad, debemos restringir el desarrollo tecnológico’. En la conferencia a la que había asistido varios especialistas y empresarios defendían, por el contrario, los avances de la tecnología como una de las fuentes de una mejoría importante en el nivel de vida en las últimas décadas. Señalaban que la nueva tecnología de cadenas de bloques o cadenas articuladas […], que permite tener bloques de programación digital estructurados de tal manera que impiden su modificación posterior, ha permitido no sólo la creación de criptomonedas, como el bitcoin, sino una serie de servicios que antes eran imposibles. […]. La misma tecnología permitirá en el futuro la realización de micropagos en internet a un costo muy inferior al actual, con medios como las tarjetas de crédito, y con una seguridad muy superior. […]. En la conferencia, como en el cartel con el que me topé, surgió la voz de un participante […] que planteaba que permitir estas tecnologías equivalía a aceptar una ‘esclavitud voluntaria’, como la de los siervos en el Medievo que recibían así la protección de los grandes señores. […]. Los avances de la tecnología han sido una constante en los últimos siglos. Siempre ha habido grupos que les han tenido miedo, como los luditas británicos del siglo XIX, que destruían telares y otras máquinas por el miedo a perder sus empleos. Nadie habría pensado que esas máquinas y sus sucesoras crearían nuevos empleos mejor pagados y que serían fundamentales en la caída de la pobreza extrema en el mundo de 84 por ciento en 1820 a 9.5 por ciento en 2015”.
Ellos, en precampaña
Luego de que en semanas y meses recientes el país vive uno de sus peores registros en cuanto a violencia y crímenes violentos, entre los precandidatos presidenciales parece no importarles pues ellos siguen metidos en sus precampañas. Hoy en el Excélsior, la periodista Yuriria Sierra, escribe que: “al menos 400 indagatorias dirigidas a operaciones hechas durante el gobierno de Roberto Sandoval en Nayarit. La extradición de César Duarte se adelantó por la presión que sintió la Procuraduría General de la República frente a la disyuntiva que generó Javier Corral. Aunque, ahora, uno de los expedientes del caso Chihuahua se fue a la Fepade. Quién sabe qué futuro tendrá. Esperemos que no el que imaginamos: la congeladora. Y José Antonio Meade estrena spot que llama a la reconciliación. Andrés Manuel López Obrador dice que espera submarinos rusos con el oro. Y Ricardo Anaya toca su guitarrita, na. […]. Ayer contamos dos casos tristísimos y dolorosos de la violencia que se vive en el país: una niña herida por una bala perdida y una joven asesinada y descuartizada. Después supimos del asesinato de otra mujer, cuyo cuerpo fue hallado debajo de la cama de su propia casa. Ahí la ocultó su esposo, quien la golpeó hasta que murió. […]. Damnificados del sismo siguen esperando ayuda. Algunos hasta el dictamen de sus viviendas. Otros recibieron tarjetas, pero los recursos quién sabe en dónde acabaron. Viene la época de lluvias, ya pasó la del frío, y siguen en campamentos. […]. Enrique Peña Nieto reconoce el mal momento que vive el sector energético en el país. Dice que pasarán diez años para recuperarnos. […]. Este 2018 será el año más contaminado, según un pronóstico de la CAME, pues esperan que entre marzo y mayo tengamos, al menos, 15 contingencias, es decir, superemos los 150 puntos Imeca. El cambio climático modifica la constancia y dirección del viento. Más calor. Más lluvia. Más autos. Más gente: somos 120 millones de mexicanos. […]. Los noticiarios se han vuelto cada vez más difíciles: una nota roja tras otra. Así la agenda del país. Si no es el narco, son los feminicidios. […]. Ni México ni el mundo atraviesan su mejor momento. Una elección tendría que ser una ventana para la posibilidad real de modificar el rumbo. Pero, hoy, las precampañas se quedan en ejercicios de posicionamiento de nombre, videos ocurrentes y cancioncitas pegajosas. Parecen ellos tan ajenos a esta realidad. ¿O alguno de los precandidatos ha pronunciado una línea novedosa? ¿Alguien le está entrando en serio a los debates urgentes? Si uno dice, el otro responde y el tercero toca algún instrumento de la orquesta. Es eso. Sólo eso. ¿En serio nos merecemos esto 123 millones de mexicanos?”.
http://www.excelsior.com.mx/opinion/yuriria-sierra/2018/01/25/1215897
Ayudando sin querer
Sin querer, Luis Videgaray terminó ayudando a Andrés Manuel López Obrador pues, el canciller impulsó a Gabriela Cuevas, quien recientemente declaró su apoyo a Obrador para el presente proceso electoral, para que ocupara la presidencia de la Unión Interparlamentaria, cosa que terminó consiguiendo, y sobre el asunto, hoy en el diario Reforma, su columna de trascendidos Templo Mayor, asegura que: “vaya paradoja: de carambola, Luis Videgaray le hizo tremendo favor a Andrés Manuel López Obrador… a través de Gabriela Cuevas. La cosa está así: la ex panista se fue a Morena, porque ese partido le garantizó una curul. Su obsesión por ser diputada se debe a que el año pasado ganó la presidencia de la Unión Interparlamentaria, en la que participan legisladores de 173 países, y no quiere perder ese hueso. Pero lo que nadie sabe -salvo el cuerpo diplomático mexicano- es que Videgaray, como canciller, giró instrucciones a las embajadas en el extranjero para cabildear esa candidatura de Cuevas. La orden que recibieron los embajadores nacionales fue obtener el apoyo de los partidos en el poder en sus respectivas misiones, para que la panista se convirtiera en presidenta de la Unión Interparlamentaria, cosa que efectivamente sucedió. Sería bueno saber qué piensa ahora el canciller de que su recomendada se haya ido con el enemigo”.
Los eficientes aliados de AMLO
En el equipo de trabajo de Andrés Manuel López Obrador ya hay espacio para la familia de Elba Esther Gordillo, o al menos eso es lo que se dice, luego del anuncio de eventos masivos con la presencia de parte de magisterio en Guerrero y en Oaxaca, por lo que hoy, en El Universal, su columna de trascendidos Bajo Reserva, asegura que: “la alianza política de Andrés Manuel López Obrador con la familia de Elba Esther Gordillo comienza a rendir frutos. En el tramo de las campañas presidenciales, entre marzo y junio, René Fujiwara y Fernando González, nieto y yerno de la maestra, tendrán listo un Congreso Nacional magisterial en Guelatao, Oaxaca, con la presencia estelar de don Andrés Manuel, aspirante de Morena a la Presidencia. Nos explican que el chico René y don Fernando se están encargando de invitar a dirigentes del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación para que abarroten la plaza. Todo en el marco del llamado movimiento Redes Sociales Progresistas. ¿Los dirigentes sindicales, encabezados por Juan Díaz de la Torre, ya habrán organizado algo similar para el candidato al que apoyan?”.
http://www.eluniversal.com.mx/columna/periodistas-el-universal/nacion/los-eficientes-aliados-de-amlo
@loscabareteros