Desde la redacción de @loscabareteros ponemos a su consideración la “Columna de columnas nacional” del miércoles 31 de enero de 2018. El “triunfo” de Osorio Chong: al paso que van las cosas para el PRI rumbo a las elecciones, si pierde el PRI la Presidencia de la República, Osorio Chong sería el ganador de esta historia… La caída de Meade no puede adjudicarse solo al candidato, sino al diseño de la precampaña y a lo que está haciendo Peña Nieto con él. Claves de 2018: la sucia operación gubernamental y el crimen organizado… De pragmatismo, percepciones y números.
Rayuela
Afirma Corral que estamos vendidos. Grave acusación que debe ser probada. ¿O no, gobernador?
http://www.jornada.unam.mx/2018/01/31/
El “triunfo” de Osorio Chong
Martha Anaya, en El Heraldo de México escribe que el caso Chihuahua ha terminado por golpear a los principales adversarios del ex Secretario de Gobernación: “Al día siguiente de su renuncia como Secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong buscó a Manlio Fabio Beltrones. Tenía urgencia de hablar con él. -Me dijo el Presidente (Enrique Peña Nieto) que estabas enojado conmigo…-, soltó el hidalguense en cuanto se encontraron. Beltrones respondió al estilo sonorense: -El Presidente está mal informado. No estoy enojado, ¡estoy encabronado! El trasfondo de esa charla era el caso Chihuahua y la detención de Alejandro Gutiérrez, ex delegado adjunto del PRI con Beltrones. Osorio Chong negaba que hubiera tenido que ver en el asunto, aunque las huellas –desde el origen de la información, hasta el apoyo que dio con un equipo especial de la Policía Federal para la detención de Gutiérrez- apuntaban hacia Bucareli, hacia él. Rechazaba el ex gobernador hidalguense ser la mano que sembró esa granada de fragmentación que habría de estallar ante varios de sus adversarios: A Luis Videgaray, su oponente hasta el final del sexenio; a José Antonio Meade, que el ganó la candidatura presidencial; al ex gobernador César Duarte, a quien siempre detestó; y a Manlio Fabio, el político que seguramente le disputaría, en la próxima legislatura, la coordinación del Grupo Parlamentario del PRI en el Senado. El ex gobernador de Sonora lo escuchó. No le creyó. De entonces para acá han transcurrido tres semanas. La campaña de Meade nomás no levanta. A la par, el poder de Videgaray va menguando. Ya hay solicitud de extradición para Duarte. Y Beltrones quedó fuera de la jugada para el Senado. Por si no fuera suficiente, su sucesor, Alfonso Navarrete Prida, no halla cómo lidiar con Javier Corral y su historia; y hasta Renato Sales ha terminado embarrado en el affaire de Chihuahua. Mientras tanto, Osorio Chong aguarda tranquilo y sonriente que lo ubiquen en el primer lugar de la lista de plurinominales al Senado. Es lo que le prometieron. Al paso que van las cosas para el PRI rumbo a las elecciones de julio –el tricolor va en tercer lugar y una derrota no es descartable-, bien podría ocurrir que el ex Secretario de Gobernación fuera al final de cuentas, si pierde el PRI la Presidencia de la República, el ganador de esta historia. Será el triunfador, claro, si es que le mantienen en pie la plurinominal que le ofrecieron como premio de consolación. Lo cual, a cómo van las cosas, ya no parece tan seguro”.
https://heraldodemexico.com.mx/opinion/el-triunfo-de-osorio-chong/
La caída de Meade
Raymundo Rivapalacio escribe en El Financiero, acerca de la poca influencia que el candidato Meade tiene en su propia campaña y su reflejo en las encuestas: “La primera encuesta de precandidatos presidenciales dio como puntero a Andrés Manuel López Obrador. Nada nuevo. Lo que sorprende es que su diferencia con José Antonio Meade, abanderado del partido en el poder, sea de dos a uno. Treinta y dos por ciento contra dieciséis por ciento son los números de la fotografía tomada por la empresa Buendía y Laredo para El Universal, que permite el parafraseo de que algo está podrido en la campaña de Meade. (…) La campaña de Meade ciertamente no prende emociones entre los priistas, pero no puede ser adjudicado, cuando menos en este momento, al candidato en sí, sino al diseño de la precampaña y a lo que está haciendo Peña Nieto con él. Para comenzar a entender lo que sucede hay que regresar al momento en que Meade fue seleccionado como candidato. En el pasado, cuando el presidente era priista, ahí se daba el cambio de mando. El rey en turno abdicaba al poder y lo entregaba al heredero. El presidente priista comenzaba a desaparecer del escenario público, mientras cada día tomaba más fuerza el candidato priista. Esto no ha sucedido porque el presidente, quizás egoístamente, no ha empoderado a su candidato, una decisión que permea negativamente en la precampaña. Esta decisión, por citar uno de los ejemplos más claros, le extirpó a Meade una de las facultades más importantes del candidato, el arbitraje sobre las candidaturas a puestos de elección popular. En el pasado, el candidato palomeaba a quienes irían a cargos importantes de elección popular, por lo que cada vez que llegaban a un estado se le arremolinaban quienes deseaban una candidatura para pedirle apoyo. Muchos de los tumultos en las plazas los provocaban quienes buscaban su favor, y proyectaban una imagen de arraigo y aceptación. Al no estar hoy en el centro de esas decisiones, no existen aglomeraciones porque Meade no tiene posibilidad de influir. Ningún apoyo que ofreciera les garantizaría una candidatura. Esta falta de empoderamiento es lo que lo hace ver solo. No contribuye que el líder nacional del PRI, Enrique Ochoa, le haya impuesto a un coordinador de giras. Diego Garza, quien iba a ocupar el puesto, quedó reducido a parte del equipo colocado por Ochoa. Al hacerlo, restándole otra herramienta de empoderamiento, Meade quedó sujeto a la agenda que le dictan desde el partido, sin que pueda desarrollar un trabajo estratégico de búsqueda de apoyos y construcción de redes a partir de su propio diagnóstico y plan de acción. Él tampoco es dueño de los tiempos de la campaña ni decide a quién ve, con quién se reúne y cuándo lo hace. (…) Otro problema toral en la falta de apoyo priista a Meade, obedece a la exclusión de los gobernadores de la propia campaña. La instrucción del jefe de la campaña, Aurelio Nuño, transmitida por Ochoa a los gobernadores, es que ellos no se involucrarían en la contienda presidencial y tendrían que limitarse al trabajo local. Meade tampoco tiene acceso a los presupuestos. Cuando lo ungieron candidato llegó con varios colaboradores muy cercanos. Uno de ellos fue Ignacio Vázquez, quien era oficial mayor en la Secretaría de Hacienda, y a quien incorporó para que manejara los recursos. No sucedió, ni sucederá. Por todos los ángulos, la campaña se ve escuálida y se refleja en cada momento público del candidato. Es decir, su equipo ocupa segundos y terceros niveles, pero no está en la primera línea de decisión”.
http://www.elfinanciero.com.mx/opinion/la-caida-de-meade-1.html
Claves de 2018
En el Reforma, el académico, columnista y politólogo, Sergio Aguayo, comenta una serie de factores que podrían intervenir en el proceso electoral, y principalmente en el resultado final de las elecciones presidenciables de este 2018, donde además de las encuestas, habrá que estar atentos a otros factores que puedan alterar la elección, como lo podría ser el crimen organizado, y por ello escribe que: “para dimensionar la importancia de 2018 quitemos protagonismo a los candidatos y centrémonos en la armazón sistémica. Las encuestas de opinión son pronósticos iniciales. En las tres últimas elecciones presidenciales fue hasta abril o mayo cuando se estabilizaron las intenciones del voto, que se verán afectadas por las siguientes variables. Compra y coacción del voto. […]. Tampoco sabemos lo suficiente sobre el crimen organizado y las urnas. Según una investigación del Instituto Nacional Electoral, en los comicios federales de 2015, 19 por ciento de las secciones eran de ‘Atención especial’ por la inseguridad. En 2018, ¿crecerá, disminuirá o se mantendrá?, ¿a quién beneficiará?, ¿explicará esa importancia numérica la propuesta de Andrés Manuel López Obrador de amnistiar a los peones y dialogar con los capos del narco? Si sumamos las estimaciones sobre efecto de compra y coacción e inseguridad, hasta 40 por ciento del electorado podría verse afectado en 2018. […]. Hay otras variables afectando la elección. Por ahora sólo las enumero: 1) para el profesor de El Colegio de México Reynaldo Ortega, un factor importante será la solidez de las estructuras partidistas; 2) ha disminuido la influencia de las grandes televisoras; 3) ha crecido la importancia de las redes sociales y su posible manipulación, en 2018 son usadas por 70 millones de mexicanos; 4) tampoco sabemos la incidencia de las candidaturas ‘independientes’, por ejemplo, la presencia en la boleta de Margarita Zavala puede afectar a Ricardo Anaya; y 5) el peso de alguna ocurrencia de Donald Trump o la aprobación o rechazo del Tratado de Libre Comercio. Pese a la incertidumbre me detengo en la creencia de que en esta ocasión Andrés Manuel López Obrador sí se alzará con la victoria y será el próximo Presidente. Hay un optimismo o alarmismo exagerado porque se pasan por alto las consecuencias del medio siglo que llevamos queriendo transitar de un régimen autoritario a uno más democrático […]. Es más sensato moderar las expectativas y ver la ecuación con otro enfoque. La culminación de la transición depende, sobre todo, de los esfuerzos de la sociedad organizada. Por ejemplo, el enfrentamiento entre Chihuahua y Hacienda es importante porque va al fondo de la corrupción en las elecciones. […]. Los comicios de 2018 son fundamentales pero no determinantes. Las verdaderas reformas vendrán por el empuje de la sociedad organizada, es el actor del cual han salido los principales impulsos al cambio desde que iniciara la transición hace 50 años con el Movimiento del 68”.
De pragmatismo, percepciones y números
Guillermo Valdés Castellanos escribe en Milenio acerca del resultado de las encuestas y de “otra” narrativa que nadie ha observado: “La distancia entre AMLO y Anaya se redujo entre noviembre y enero. Contra la percepción generalizada en ciertos círculos de opinión de que López Obrador va en caballo de hacienda a Los Pinos, las dos encuestas públicas que se conocen aseguran lo contrario. (…) Todo fue comentarios elogiosos (algunos preocupados) por lo bien que la está haciendo. La lista es larga. Los hubo para destacar el humor con que se burla y minimiza las críticas que le hacen, aunque sean asuntos realmente serios (Rusia, Venezuela), al grado de que se vuelve nota: AMLO se divierte haciendo precampaña mientras que Meade sufre y Anaya se dedica a nimiedades. Otros señalaron su capacidad para fijar la agenda, a pesar de que lo haga con propuestas francamente regresivas (cancelar la reforma educativa y regresarle el poder al sindicato). Muchos análisis se dedicaron a resaltar la cargada de nuevos conversos a la fe lopezobradorista, destacadamente la de la senadora Gabriela Cuevas (¿cómo es posible alcanzar ese nivel de incongruencia y exhibirlo sin rubor en tantas entrevistas?); otros hicieron lo propio con los desplantes de autoritarismo (que destilan desprecio por la gente y por sus seguidores, como fue el dedazo que ungió a Cuauhtémoc Blanco como candidato a gobernador en Morelos) o el reparto de perdones a diestra y siniestra (¡ya perdonó a Carlos Salinas, fundador y jefe de la mafia!) y los llamados a que se sigan sumando a su cruzada todo tipo de desertores, oportunistas, corruptos y mafiosos arrepentidos, porque de ellos será el reino de los cielos (es decir, un huequito en su gobierno). Todo ello aderezado por el triunfalismo del mismo AMLO, que repite —al igual que hace 12 años— que va 15 puntos arriba en las encuestas (las cuales solo él conoce, ya que nunca las muestra o son negadas por los supuestos autores) con la intención clara de crear una percepción de que su triunfo es inevitable, al grado de que declaró que la campaña ya no le importa, y que lo que le preocupa son las propuestas de gobierno y su equipo. El círculo se completa cuando en un periodo de pocos días los analistas titulan sus artículos con variantes del mensaje que López quiere que se convierta en la verdad inapelable: ¿quién va a parar a AMLO? ¿Qué haremos una vez que gane? AMLO ya cambió, se ha vuelto un pragmático (aunque cada vez más contradictorio e incongruente) y su estrategia le ha resultado. Resultado final: un cambio en el estado de ánimo… del círculo rojo, que se lee a sí mismo, se retroalimenta y acaba comprando la versión. El problema es que la realidad no es tal. Las únicas dos encuestas públicas de este año, las de El Universal (Buendía) y de El Economista (Mitofsky) coinciden en los siguientes datos: a) López Obrador va en primer lugar. Pero, b) en ambas la distancia con Ricardo Anaya, segundo lugar, no se agranda, sino al contrario, se reduce al comparar los resultados de noviembre con los de enero. (…) Estos datos no confirman un despegue espectacular de AMLO, ni una ventaja insalvable, sino menor, por lo que hoy a fines de enero, se anticipa una competencia más cerrada con respecto a la que esas encuestas pronosticaban hace dos meses. Insisto en mi tesis de hace dos meses: esta elección la ganará quien se equivoque menos. Entre noviembre y enero el que lo ha hecho es Meade”.
Meade, ¿puede?
Quedan pocos días para que termine el periodo de precampañas y como resultado de las mismas podemos decir que Andrés Manuel López Obrador es el ganador pues se mantiene como puntero para diferentes encuestas, al respecto, en El Universal, la periodista Ana Paula Ordorica, escribe que: “cierra el mes de enero. Quedan once días de periodo de precampañas. El saldo es positivo para Andrés Manuel López Obrador; de neutral a bueno para Ricardo Anaya y preocupante para José Antonio Meade. Para Andrés Manuel López Obrador el saldo es positivo porque sigue siendo el candidato a vencer. Su campaña logra que los mensajes del candidato sean replicados, comentados y recordados. El rasgo más preocupante de Andrés Manuel López Obrador, sus desplantes autoritarios y su semblante desencajado, hasta enojado, ha sido sustituido por el candidato bromista y dicharachero. […]. En el caso de Ricardo Anaya el discurso ya no se centra en su fortuna inexplicada e inexplicable. Se le ve cantando y tocando la guitarra. Parecería que embarrarle a los mexicanos la superioridad intelectual con anuncios en inglés y francés no sería la mejor estrategia, pero tampoco le ha restado simpatías al panista. […]. Por el lado del Partido Revolucionario Institucional, sabemos que el partido arrancó con una crisis importante. Basta tomar en cuenta la pérdida de estados gobernados por el tricolor en lo que va del sexenio. […]. Sin embargo, vemos en este mes y medio de precampaña una narrativa que debiera preocupar al Partido Revolucionario Institucional. […]. La narrativa es que Meade no levanta. Lo que comenzó como un discurso de López Obrador en el sentido de que Osorio Chong era un mejor candidato, ahora se ha vuelto un discurso repetido con preocupación por los simpatizantes de Meade y con alegría por sus detractores. […]. Meade es el candidato de las propuestas; el que va a seguir de gira, escuchando a la gente y acreditando que es el más preparado para gobernar a México. […]. Para la campaña de Meade el adversario a vencer es el esquema autoritario. Por ello el Partido Revolucionario Institucional ha decidido confrontar a Andrés Manuel López Obrador y prácticamente ignorar a Anaya. A diferencia de Anaya, que ha preferido confrontar al Partido Revolucionario Institucional con la estrategia de quedarse en la final en contra de Andrés Manuel López Obrador. Cierra así enero. Quedan 11 días de precampañas disfrazadas de campañas”.
http://www.eluniversal.com.mx/columna/ana-paula-ordorica/nacion/meade-puede
¡Aguas con “los rusos”!
De nueva cuenta las noticias falsas en torno a Andrés Manuel López Obrador han comenzado a circular, diciendo que el precandidato de Morena, si llegara a ganar las elecciones presidenciales, entregaría el petróleo a Rusia, ya que Rusia controla otros sectores petroleros en América Latina, pero a los que hacen este tipo de campañas se olvidan que durante este periodo, encabezado por Enrique Peña Nieto, parte de ese control ya fue entregado a empresas extranjeras al permitirse que intervinieran en los pozos mexicanos, y sobre el asunto, hoy en La Jornada, el periodista Julio Hernández López, escribe que: “la primera impresión puede llevar a risa […]: una orquestación de llamadas telefónicas pretendió alertar a poblanos acerca de las presuntas intenciones de Andrés Manuel López Obrador de entregar el petróleo mexicano a los rusos. Pero los mensajes de advertencia, que llegaron a celulares y a aparatos fijos desde números identificables, que a su vez no contestan llamadas, constituyen una temprana acometida de guerra propagandística que da una idea de las dimensiones de distorsión y ensuciamiento a que se llegará en el minado camino rumbo a la sucesión presidencial de este año. […]. La voz de la guerra sucia añade en esas llamadas: Rusia controla el petróleo de Venezuela. López Obrador promete echar para atrás la reforma energética. ¿Por qué? Para hacer su voluntad con el petróleo de los mexicanos. ¡Que no se lo entregue a los rusos! No permitas que López Obrador traiga al enemigo ruso a profanar con sus plantas nuestro suelo, piénsalo y pasa la voz. ¡Los rusos! La mayoría de los elementos de esa argumentación es falsa: John Ackerman no dirige ningún canal de televisión, ni nacional ni extranjero, y es, junto con Irma Eréndira Sandoval, cada uno con carreras políticas propias, lo cual no significa que sean divergentes, parte del segmento más congruente de la izquierda aglutinada en torno al abanico de múltiples tonalidades del lopezobradorismo. […]. Tampoco resiste un análisis serio esta convocatoria a inflamar el espíritu patrio ante invasiones extranjeras, así sean económicas y, en el caso, en el ámbito de los energéticos. Más que hipotéticas cesiones a los rusos, en México se ha vivido una sistemática entrega de la riqueza petrolera a empresas privadas extranjeras, en una traición histórica muy aplaudida en centros de poder económico, no sólo con sede en Estados Unidos, pero sí especialmente en este país que, a lo largo de la administración peñista, se ha convertido en un ventajoso y malvado tutor de los políticos mexicanos rapaces. […].
http://www.jornada.unam.mx/2018/01/31/opinion/008o1pol
De la Madrid frente a los hipócritas
Sobre el tema de la marihuana y la polémica que se ha desatado después de las declaraciones del Secretario de Turismo de que se debería legalizar su consumo, al menos en zonas turísticas, hoy en El Universal, el periodista Ricardo Rocha, escribe sobre otras drogas que se pueden considerar legales, ya sean refrescos o tabaco que, al igual que la marihuana, casa daños a la salud, aunque hay registro de que a causa del alcohol se da el mayor número de muertes, y sobre este polémico tema escribe que: “en México no legalizamos el consumo de drogas porque es el gran negocio del crimen organizado y los gobiernos. Cualquier otra argumentación para justificar el ‘modelo mexicano’ es absolutamente hipócrita. Aquí la clandestinidad genera unos 30 mil millones de dólares cada año —600 mil millones de pesos— que se reparten a manos llenas mandos federales, gobernadores, policías, presidentes municipales, legisladores y los capos de carteles que operan en la mayor parte del territorio nacional. Aunque el costo es brutal: una cuota anual de sangre que rebasa los 25 mil muertos y desaparecidos. Y que ha hecho de la violencia y la inseguridad parte del paisaje en ciudades y pueblos de todo el país. […]. ¿Y qué ocurre con las ‘drogas legales’? ¿Alguien ha visto lo que le pasa a una moneda luego de un tiempo en un refresco de cola? ¿Acaso no saben que el tabaco tiene más de tres mil sustancias tóxicas y no por eso deja de venderse en cada esquina? ¿De verdad ignoran que el alcohol es la causa máxima de accidentes, violencia intrafamiliar y trastornos mentales? ‘La legalización aumentaría el consumo’. Tampoco es cierto. No ha ocurrido en los países en que se ha despenalizado. Yo no conozco a nadie que deje de ir a trabajar para ir a embriagarse porque se topó con un espectacular anuncio de tequila con una bella modelo como sinónimo de éxito en la escala social. […]. Por eso ha llamado la atención la propuesta reciente del secretario de Turismo, Enrique de la Madrid, de que ‘cuando menos en las zonas turísticas del país deberíamos de legalizar el uso de la marihuana… nos haría un enorme daño perder destinos como Baja California Sur y Quintana Roo por temas de combate al narcotráfico’. Esto, en clara alusión a que 2017 ha sido el año más violento en esos y otros muchos estados. De la Madrid sabe de eso, porque en su gestión México ha ascendido del décimo al sexto lugar en turistas recibidos. Su sector representa ya casi 9 por ciento del Producto Interno Bruto nacional y genera 10 millones de empleos. Pero más allá de los beneficios económicos, la prohibición es un enorme cáncer social que nos hemos negado a extirpar por conveniencias tan criminales como corruptas y sobre todo hipócritas. […]. El problema no es qué hacer con los criminales. El problema es qué hacer con los consumidores”.
http://www.eluniversal.com.mx/columna/ricardo-rocha/nacion/de-la-madrid-frente-los-hipocritas
Vive, sí, pero el misterio sigue
Han pasado ya varias horas desde que el joven Marco Antonio Flores fue localizado pero, por su estado de salud ha sido imposible que presente su declaración, pero lo que sí sabemos es que policías que participaron en su detención huyeron y se ampararon, lo que levanta sospechas luego de que se afirmara que no se trata de una desaparición forzada y que solamente lo tuvieron detenido por cinco minutos, y sobre este tema sin resolver, hoy en Milenio, el periodista Carlos Marín, escribe que: “se sabe más hoy: si bien el joven preparatoriano no ha podido contar lo que vivió en los cinco días de su desaparición, debe determinarse con claridad por qué fue puesto en libertad y saberse si su actual estado mental se deriva o no de su detención. Tiene que explicarse de modo irrebatible por qué fue detenido, puesto que no aparece ningún denunciante y los policías admiten que no tuvieron delito que perseguir. ¿Por qué uno de los cuatro uniformados huyó a Guerrero y otro se amparó, pero está dispuesto a declarar? Los dos restantes dieron la cara y afirman que Marco Antonio fue liberado cinco minutos después de haber sido subido a la patrulla. Aunque el procurador Edmundo Garrido precisa que la fugaz privación de la libertad no puede hasta el momento considerarse una desaparición forzada, porque no hay elementos para presumir que se le quiso ocultar o retenerlo (salió por su propio pie del juzgado cívico en el Edomex), por fortuna el muchacho vive pero el misterio sigue: ¿qué sucedió? ¿Por qué se violaron los protocolos? ¿Con qué fin fue detenido…?”.
AMLO deportista
Con tal de ganar elecciones, o al menos una importante cantidad de votos, Andrés Manuel López Obrador ha comenzado a rodearse de figuras del futbol mexicano, ya que en días pasados postuló como precandidato al gobierno de Morelos al ex futbolista Cuauhtémoc Blanco al considerarlo como el mejor posicionado y ahora, se sabe que intentó convencer a Jorge Vergara, dueño de las Chivas rayadas de Guadalajara de ser presentado como precandidato a alcalde de Zapopan aunque el empresario no aceptó, y de esto, hoy en el diario Reforma, su columna de trascendidos Templo Mayor, asegura que: “con tal de ganar votos, no sería raro que Andrés Manuel López Obrador se aviente a prometer que en su gobierno el Cruz Azul será campeón. Por lo pronto ya anda coqueteando con otras dos aficiones: la del América y… ¡la de Chivas! Primero hizo candidato a gobernador al ídolo azulcrema Cuauhtémoc Blanco y ahora le ofreció a Jorge Vergara, el dueño del Rebaño, la alcaldía de Zapopan, en la zona metropolitana de Guadalajara. No es la primera vez que le ofrecen al empresario un cargo político. En este mismo proceso, algunos panistas lo promovieron como su eventual candidato a la gubernatura. Sin embargo, hasta donde se sabe, es mucho más probable que Vergara vuelva a usar calcetines, antes que postularse a un cargo público”.
AMLO con Mayos de Navojoa
En Milenio, su columna de trascendidos Trascendió, asegura que: “que ayer, en Sinaloa, Andrés Manuel López Obrador se voló la barda, pero no pegando jonrón, pese a que el tema era el beisbol. Resulta que simpatizantes le entregaron a una gorra y una franela de los Tomateros, recientes campeones de la Liga Mexicana de Beisbol, pero el tabasqueño no quiso ponérsela porque, como dice que no es ‘chaquetero’, confesó que la verdad en la final le iba a los Mayos de Navojoa. Pero ahí no terminó la cosa y dijo que de ser Presidente ¡aumentará al doble y hasta al triple el número de jugadores mexicanos en Grandes Ligas! Ya más sereno, para terminar el día deportivo, el ex boxeador Érick ‘El Terrible’ Morales lo acompañó en su mitin en Tijuana”.
http://www.milenio.com/firmas/trascendio_nacional/Trascendio_18_1113668645.html
¿El árbitro apostando a un jugador?
El conflicto entre el diario El Universal y Ricardo Anaya llegó hasta manos del Instituto Nacional Electoral y a pesar de que había elementos para sancionar, o al menos bajar del aire un spot del precandidato presidencial panista, el Instituto no hizo nada para tratar de solucionar el problema, y de ese mismo caso, hoy en El Universal, su columna de trascendidos Bajo Reserva, asegura que: “ante el Instituto Nacional Electoral […] ciudadanos y medios quedan indefensos. Primero, el Instituto, que preside el consejero Lorenzo Córdova, negó las medidas cautelares solicitadas por EL UNIVERSAL, para que sacara del aire un spot con cargo a los tiempos del Estado, que fue utilizado por el entonces Presidente del Partido Acción Nacional, Ricardo Anaya, para atacar al diario con mentiras. Luego, acosa con requerimientos a dos periodistas que aparecen en el spot de Anaya para obligarlos a ir ante los consejeros a “declarar” para saber si ellos autorizaron el uso de su imagen en el mismo anuncio. Los comunicadores no se han presentado y el Instituto Nacional Electoral amenaza con sanciones y, de paso, apuesta por alargar aún más el asunto. El Instituto Nacional Electoral también se negó a permitir a este diario el derecho de réplica ante los mensajes con información falsa, dado que no está obligado por la ley a hacerlo. El problema, nos hacen ver, es que da la impresión de que el Instituto Nacional Electoral no quiere incomodar a alguien que considera que pueda llegar a la Presidencia. ¿El árbitro apostando por alguno de los jugadores?”.
@loscabareteros