«El nombramiento de Quirino Ordaz para servir en la Embajada de España tuvo muchas reacciones en el mundillo político, en el académico y en el de la administración pública. La interpretación dependió de dónde estaban parados quienes aventuraban una lectura. Los radicales opositores del Presidente quisieron vincularlo con un
pago de favores” porque, según ellos, fue el enlace de Andrés Manuel López Obrador “con el Cártel de Sinaloa.
Otros dijeron que el mandatario intentaba dinamitar al PRI y al PAN por dentro, trayéndose a uno de ellos antes del 2024. Unos más señalaron que era una lección para Marcelo Ebrard” (y en eso me voy a entretener más adelante) porque decidió sin consultarle. Y hay quien incluso vio en Quirino un “puente para hablar con Enrique Peña Nieto. Ja.»: Alejandro Páez.




