«Fue un gesto político, no judicial: el ministro presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Arturo Zaldívar Lelo de Larrea (ZLdeL), recibió ayer a administradores y beneficiarios de fondos públicos, a título de consultores científicos privados, que están explicablemente preocupados por la pretensión de la Fiscalía General de la República (FGR) de llevarlos a la cárcel y sujetarlos a proceso penal.
No habría razón práctica para que un grupo de ciudadanos obtuviera una audiencia con el representante del Poder Judicial Federal (PJF) a partir de una solicitud de órdenes de aprehensión que ha sido negada dos veces por jueces. Tiempo y oídos faltarían si privilegio similar se otorgara a quienes deseen hablar con el ministro presidente de la Corte por un proceso judicial que ni siquiera ha iniciado y que ya tiene dos rechazos formales. La respuesta de ZLdeL fue protocolaria: asentó que los escuchaba con respeto y atención, en función de que ellos lo habían solicitado, y reiteró lo obvio: que el PJF seguirá actuando con independencia e imparcialidad. Oh, sí»: Julio Astillero.




