AMLO, por revertir las reformas zedillista y calderonista en materia de pensiones

Sin dar pormenores de ninguna de las reformas constitucionales que enviará el Congreso, el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que revertirán las reformas promovidas en materia de pensiones en los gobiernos de Ernesto Zedillo y de Felipe Calderón porque “afectan injustamente a los trabajadores del IMSS y del ISSSTE pues les impiden jubilarse con el 100 por ciento de su salario”. Para repararlo este año, se creará un fondo semilla de 64 mil millones de pesos, que se irá incrementando, se financiarán las compensaciones a los trabajadores afectados por reformas antilaborales.

En el majestuoso recinto legislativo donde se aprobó la Constitución de 1857, acompañado de su gabinete, el mandatario también planteó modificaciones en favor de los pueblos indígenas que obligue al estado mexicano a “consultarlos cuando se realicen obras que puedan afectar su vida y entorno y dotarlos de legitimidad jurídica para recibir recursos del presupuesto y promover acciones de inconstitucionalidad ante leyes que les afecten.

Como lo había anunciado, ratificó su propuesta de reforma electoral y al Poder Judicial de tal manera que consejeros electorales, ministros, magistrados y jueces sean electos por el voto popular. En paralelo, propondrá la reducción de regidores en los municipios; eliminar las diputaciones y senadurías plurinominales con lo cual se reducirá a 300 diputados y 64 senadores.

En cuanto a la lucha contra la corrupción, López Obrador fue enfático en señalar que se convertirá en política de Estado la austeridad republicana, por lo que “se volverá a redactar, con mayor claridad y contundencia el artículo 127 constitucional para reforzar el principio de que ningún servidor público podrá ganar más que el presidente de la República. Con ello, dijo, se honrará el legado de Benito Juárez para que no sólo se tenga en los cuadros.

En el ámbito económico, destaca la reforma para fortalecer la Comisión Federal de Electricidad a la cual se le devolverá su carácter de empresa pública y estratégica, en beneficio de los consumidores domésticos y del interés nacional. Este criterio se eliminó, dijo, durante el periodo neoliberal para favorecer la privatización de la industria eléctrica.

Anunció que se prohibirá en la Constitución el uso del maíz transgénico, la extracción de hidrocarburos mediante el fracking y hacer respetar las zonas donde haya escasez de agua por lo cual sólo se autorizará concesiones para el uso doméstico.

Se endurecerán las penas para el delito de extorsión que comete el crimen organizado así como los delitos de cuello blanco perpetrados a través de empresas factureras.

Otra iniciativa pretende modificar la edad para recibir la pensión de adultos mayores, así como convertir la pensión para personas con discapacidad en universal; otorgar becas para estudiantes pobres así como garantizar la atención médica integral. Que los trabajadores “puedan ser dueños de sus viviendas”; prohibir el maltrato animal.

Establecer el salario mínimo para maestros, médicos, enfermeras, soldados, marinos e integrantes de la Guardia Nacional, así como garantizar que bajo ninguna circunstancia el salario mínimo se incremente por debajo de la inflación.

Para evitar que la Guardia Nacional se corrompa como ocurrió con la desaparecida Policía Federal, se propone esta nueva institución creada para realizar tareas de seguridad se traslade a la Secretaría de la Defensa Nacional.

La Jornada