El discurso del Almirante Soberón
Respecto a la celebración del 106 aniversario de la Revolución Mexicana, y a propósito del discurso del Almirante Vidal Soberón, Julio Hernández López, escribe hoy en el periódico La Jornada, lo siguiente: “Las fuerzas armadas mexicanas están a punto de conseguir del Congreso de la Unión un nuevo marco jurídico que otorgue certeza legal a lo que hasta ahora y durante largos años han venido realizando en el pantanoso terreno de la naturalmente belicosa suplencia de las fuerzas de seguridad pública, ante el desbordamiento de lo que suele llamarse el crimen organizado. Las bancadas priístas y panistas, con sus aliados de costumbre, están prestas para satisfacer las exigencias castrenses, previos encuentros y negociaciones en los que los legisladores se han comprometido a regularizar y formalizar la acción supletoria del Ejército, la Marina y la Fuerza Aérea en tareas de combate a la delincuencia mayor. En cumplimiento de ese guión en curso, ayer, el almirante Vidal Francisco Soberón Sanz, secretario de Marina, pronunció en el campo Marte el discurso de más relevancia política. En una de sus partes, aportó su interpretación muy genérica de lo que en términos constitucionales han venido violentando con acciones específicas: “como Fuerzas Armadas, nuestro actuar siempre ha respondido a los preceptos plasmados en la Constitución, cuya esencia puede sintetizarse en procurar el bienestar de nuestros conciudadanos. Es, precisamente, este noble fin lo que nos ha llevado a participar en acciones de seguridad pública; una función con la cual estamos totalmente comprometidos, no obstante, las dudas e inquietudes de quienes consideran que ésta no es nuestra misión; una aptitud (sic , en la página de Internet de Los Pinos: nota del Astillero) que entendemos y respetamos; sin embargo, ante el llamado de nuestro pueblo es imprescindible actuar”.
http://www.jornada.unam.mx/2016/11/21/opinion/008o1pol
Peña en la lona; Trump lo hunde
El triunfo del candidato republicano Donald Trump en las elecciones presidenciales de EU, no sólo golpeó al peso mexicano, el ánimo y la certidumbre de los mexicanos, también dio un duro golpe a la ya desgastada imagen del Presidente Enrique Peña Nieto, que cayó a su nivel más bajo. Todos esos aspectos forman parte del “Efecto Trump”. En El Universal, el periodista Salvador García Soto, escribe que: “según el sondeo elaborado por Buendía y Laredo para El Gran Diario de México, la calificación del Presidente descendió a su nivel más bajo desde que se realiza esta encuesta, al registrar apenas un 25 por ciento de mexicanos que aprueba el trabajo de Peña Nieto, contra 66 por ciento que lo desaprueba […]. Y si la aprobación del Presidente cayó entre los mexicanos en general, la caída es todavía peor entre los priístas, pues casi 50 por ciento de los que dicen ser militantes del partido del Presidente […] reprueba la forma en que gobierna Peña Nieto […]. Cuando le preguntaron a los encuestados sobre la peor acción de Peña Nieto y su gobierno, lo más mencionado, con 12 por ciento fueron las reformas estructurales impulsadas por el Presidente, mientras que lo segundo más rechazado fue su actuación en materia de inseguridad/delincuencia y la tercera acción que más molestó a los mexicanos de este gobierno fue la reunión con Donald Trump […]. Es decir que Trump no sólo fue un problema para Peña desde su repudiada visita y el trato lisonjero que le dio en Los Pinos, pues casi 70 por ciento sigue considerando, aún después de que el magnate ganara el pasado 8 de noviembre, que el Presidente se equivocó con eso y ofendió a los mexicanos, sino que además su triunfo […], no necesariamente tuvo un efecto positivo para el Presidente en la opinión de los mexicanos que evalúan su desempeño a través de las encuestas […]. Así, entre Trump y Duarte, Peña Nieto seguirá en la lona en las encuestas de aprobación, en los niveles más bajos desde que se realizan ese tipo de mediciones […]. De ese tamaño es […] el ‘efecto Trump’ para el Presidente mexicano”.
Ya se “siente” el cambio en Chihuahua: No, pos´sí
Mientras que en el diario Reforma, su columna de trascendidos Templo Mayor, asegura que: “ya comenzó a sentirse el cambio en Chihuahua. El panista Javier Corral mandó sacar el retrato de Pancho Villa de su oficina y en su lugar puso el del maderista Abraham González. No, pos’ sí”.
http://www.reforma.com/aplicaciones/editoriales/editorial.aspx?id=101639
El éxodo que viene
Por su parte el periodista y escritor, León Krauze, escribe en el mismo diario, acerca de la incertidumbre que viven los mexicanos residentes en EU tras el triunfo del magnate, pues: “la estrategia punitiva de deportación de Donald Trump ha alarmado a la opinión pública mexicana. La cancillería ha respondido con una serie de medidas concentradas en la red consular, que podría enfrentar un reto para el que quizá no esté preparada. En Estados Unidos, gobiernos locales y organizaciones que defienden los derechos de los inmigrantes están en pie de guerra […]. Aun así, a mí a entender, hay un equívoco en la lectura reciente de los planes de Trump. La gran mayoría de las voces se ha concentrado en el proyecto de deportación masiva […]. Pero el propósito de la estrategia de Donald Trump puede no necesariamente ser solo el principio de una nueva etapa de deportaciones en masa. Hay […] una meta escondida que podría tener un impacto mayor en el futuro inmediato de la gran comunidad hispana, indocumentada o legal. Se trata del odioso concepto de la ‘auto-deportación’: hacer la vida tan difícil a los inmigrantes para que, perseguidos y amenazados, no encuentren otra salida más que volver a sus países de origen. La ‘auto-deportación’ ha estado en el centro de la estrategia migratoria de la derecha republicana desde hace tiempo […]. Esa es la verdadera intención de Donald Trump y sus secuaces en materia migratoria: más el éxodo masivo […] que la onerosa deportación. De ser así, el desafío para el gobierno mexicano […] sería no solo mayúsculo sino absolutamente inédito. Lo primero que hay que entender es que el regreso de incluso una fracción de la enorme comunidad mexicana que ha echado raíces en Estados Unidos implicaría un galimatías no solo económico-laboral sino social e incluso cultural […]. Evidentemente existen casos de ‘soñadores’ que han vuelto a vivir a México y han logrado rehacer sus vidas. Pero no es, ni de lejos, un escenario deseable […]. Para la mayoría, tener que volver a México implicaría una reinserción dolorosa […]. Es difícil imaginar cómo esta suerte de contra-diáspora producto del posible gran éxodo hispano podría terminar en una asimilación exitosa. Estamos, nada menos y nada más, que ante la coyuntura que podría marcar la historia de la región en el siglo XXI. La responsabilidad de todos es enorme”.
Réquiem para el TLC
La renegociación del Tratado de Libre Comercio (TLC), es un tema que EU ya anunció que pondrá sobre la mesa, y pese a la opinión de analistas que no pintan un buen panorama para México al respecto. En Milenio, el periodista Carlos Puig, escribe que: “el Presidente Enrique Peña Nieto sigue optimista. En su visita a Perú tocó el tema del Tratado de Libre Comercio frente a la intención de Donald Trump de renegociarlo, para lograr más beneficios para Estados Unidos […]. El mandatario mexicano consideró que, en esta nueva etapa de la relación con Estados Unidos de América, ‘se abre una gran oportunidad’. Este fin de semana, el Partido Demócrata de Estados Unidos eligió a su nuevo líder en el Senado, el neoyorquino Chuck Schumer, quien en su primera entrevista del domingo dijo que había muchos temas en que sus compañeros podrían trabajar con el Presidente Trump. Uno de ellos, el TLC, que también quieren renegociar. La declaración de Schumer es un buen recordatorio de que el tratado fue negociado por la presidencia de Bush, aprobado por el Congreso en tiempos de Bill Clinton, pero con una mayoría de votos en contra de demócratas […]Así que el próximo Presidente quiere reabrir el tratado, la mayoría de los republicanos jugarán con él, también el liderazgo demócrata. Y según nos anunció el Presidente Peña, él está dispuesto. El TLC como hoy lo conocemos está muerto. La pregunta es si alguien contempla el costo para ambas economías frente a la incertidumbre de una nueva negociación y el parón de inversiones que esperarán las nuevas reglas. Y, por supuesto, si el gobierno de México sabe qué quiere al final de este camino. Porque Trump y sus aliados lo tienen bastante claro”.
http://www.milenio.com/firmas/carlos_puig/tlc-donald_trump-comercio-negociacion_18_852094819.html
¿Cuál es la verdad?
En el Excélsior, su columna de trascendidos, Frentes Políticos, asegura que: “aunque Agustín Carstens, Director del Banco de México, acostumbrado a comparar con metáforas la marcha de la economía nacional y que incluso ha asegurado que a México apenas le da gripa, dijo ahora que la tormenta llamada Donald Trump ya pasó. Y que la elección del candidato republicano a la Presidencia de Estados Unidos no afectará a los mexicanos. Lo malo es que sólo él lo cree. Porque, de acuerdo con la más reciente encuesta BGC-Excélsior, sigue repuntando el pesimismo sobre la situación de México y predomina cada vez más la percepción de deterioro económico del país. Carstens incluso ve a Trump ‘conciliador’. ¿En serio?”
http://www.excelsior.com.mx/opinion/frentes-politicos/2016/11/21/1129437
Fuga de Duarte; siguen sus pistas
La fuga de Duarte sigue siendo un tema prioritario para el Gobierno Federal, pues asegura sigue en la ardua búsqueda del ex priista. Al respecto, en Milenio, su columna de trascendidos Trascendió, asegura que: “en el Gobierno federal analizan si las pistas que han surgido sobre el Gobernador con licencia de Veracruz, Javier Duarte, en el sentido de que se encuentra en Chiapas, son una estrategia del mandatario estatal para escapar por otra zona del país. Aunque hay un gran número de elementos de las fuerzas federales buscando a Duarte, las autoridades no han descuidado diversos puntos fronterizos por donde el Gobernador puede huir; sin embargo, tampoco descartan que ya se haya fugado”.
http://www.milenio.com/firmas/trascendio_nacional/Trascendio_18_852094820.html
Chulada de Clan
En El Universal, el periodista Carlos Loret de Mola, comparte un listado de los funcionarios públicos vinculados con el Gobernador con licencia Javier Duarte, mismos que pese a estar acusados de robos y corrupción, hay se ostentan como diputados, y forman parte del circulo que apoyó al veracruzano en su escape, pues asegura “Duarte no actuó solo. El ex Gobernador de Veracruz contó con una muy sólida red de socios, cómplices y aliados que le permitió hacer lo que hoy lo tiene prófugo de la justicia. Para su mala fortuna, Duarte no pudo conseguir para sí mismo lo que sí logró para los suyos: el fuero. Aquí está la lista, seguramente preliminar, del clan: 1. Antonio Tarek Abdalá Saad. […] Con Duarte empezó en el DIF veracruzano y subió a la Secretaría de Finanzas. Tiene tres denuncias penales en su contra en la PGR por desvío de mil 600 millones de pesos […]. Hoy es Diputado federal por el Partido Revolucionario Institucional (PRI). 2. Jorge Alejandro Carvallo Delfín. De ser dirigente estatal del PRI, Duarte lo jaló como su Secretario particular […]. Se le acusa de firmar contratos con empresas fantasmas. Él niega todo. Hoy es Diputado federal por el PRI. 3. Alberto Silva Ramos fue dos veces vocero de Duarte, […] está involucrado en el escándalo de las empresas fantasma […]. Él niega todo. Hoy es Diputado federal por el PRI. 4. Adolfo Mota Hernández. Fue Secretario de Educación de 2010 a 2015. La dependencia es una de las más denunciadas y endeudadas […]. Él se dice inocente. Hoy es Diputado federal por el PRI. 5. Edgar Spinoso Carrera […]. Duarte lo nombró Subsecretario de Finanzas y luego oficial mayor de la Secretaría de Educación local. Lo cesaron cuando la Auditoría Superior denunció que el 80 por ciento de las aportaciones federales habían sido desviadas… ¡el 80 por ciento! […]. Él se dice inocente. Hoy es Diputado federal por el Partido Verde. 6.- Juan Manuel Castillo González fue denunciado por retención indebida de 22 millones de pesos en perjuicio de 84 mil trabajadores del gobierno. Él se dice inocente. Hoy es Diputado local por el PRI. 7.- Vicente Benítez González desfiló por las tres dependencias con mayores quebrantos patrimoniales […]. Y luego fue oficial mayor de la Secretaría de Educación. Se le atribuyen varias propiedades de lujo en Costa Rica. Él se dice inocente. Hoy es Diputado local por el partido Nueva Alianza”.
El apretón a las clases medias
Enrique Galván Ochoa, hace un recuento de los efectos de la devaluación y el aumento de la tasa de interés que se generaron en nuestro país. Al respecto, esto escribe en la Jornada: “A ¿cuántas personas de la clase media expulsará la devaluación y las hundirá en la pobreza? De acuerdo con un estudio realizado por el Inegi, en 2013 la clase media en México sumaba 44 millones de personas. Este era su perfil: el ingreso mensual por familia superaba los 12 mil 400 pesos. Eran mil dólares aproximadamente. Contaban con una computadora y tarjeta de crédito, a la que abonaban alrededor de mil 660 pesos cada corte, los hijos asistían a escuelas públicas. Aquellos mil dólares se han convertido en menos de la mitad, en su equivalente en pesos. El fin de semana la cotización del dólar subió a $21.50. Culpan a Trump porque se ha pronunciado en contra del Tratado de Libre Comercio para América del Norte. Un sondeo en Twitter (ver gráfica) muestra que la mayor parte los encuestados opina que no ha habido beneficios más que para las grandes empresas. El Banco de México ha venido negando la realidad: sostiene que la devaluación no impacta los precios. Sin embargo, el vicegobernador, Manuel Ramos Francia, ya lo admitió: La depreciación (ellos, por pena tal vez, no usan el término devaluación, pero es lo mismo para efectos prácticos) del peso mexicano va a reflejarse en un traspaso en precios. ¿Cuáles precios? Los que se comercian internacionalmente, sobre todo, por ejemplo, de mercancías y esto ya lo estamos viendo, dijo. México es un importador neto. Desde gasolina hasta maíz. La inflación pegará a todos, pero la clase media probablemente sufrirá más (la pérdida del estatus) y veremos familias volver a la pobreza. El banco central subió el jueves anterior su tasa de interés a 5.25 por ciento, para contrarrestar las presiones inflacionarias, derivadas, como ya reconocen, de la devaluación. Hay la opinión de que sólo dio a ganar decenas de miles de millones de pesos a los especuladores y no contendrá la inflación ni la devaluación. http://www.jornada.unam.mx/2016/11/21/opinion/006o1eco
Frente al portazo
En referencia a nuestro festejo de la revolución mexicana, Jesús Silva Herzog Márquez, hace un análisis de la presencia casi permanente e ineludible de los norteamericanos en nuestra política. Esto es lo que escribe hoy en Reforma: “Estados Unidos ha estado ahí, siempre, ante nosotros. Desde antes de la independencia, el vecino ha sido el otro que seduce y amenaza. El contraste económico y político no podría ser mayor, dijo Octavio Paz que siempre pensó al mexicano en contraposición al norteamericano. Allá desarrollo, riqueza y poder. Acá subdesarrollo, debilidad, dependencia. Pero la diferencia más profunda, a juicio del poeta, no era de orden material sino simbólico: dos versiones de Occidente. Un hijo de la Reforma y un descendiente de la Contrarreforma. Mucha razón tenía Edmundo O’Gorman al subrayar la importancia de Estados Unidos en la conformación del ser mexicano. Para el historiador, la identidad nacional fue forjándose bajo la presión del pasado y del exterior. La lealtad a la tradición, por una parte, y la fascinación por el vecino, por la otra. Su argumento en México, el trauma de su historia, ese extraordinario ensayo que escribió en 1977, es que nuestro país es incomprensible sin esa admiración y esa desconfianza por el vecino del norte. Al separarse de España, el nuevo país tenía un modelo de modernidad a la mano. Era un país que había soltado los lazos con Europa, que había fundado un exitoso régimen republicano desatando poderosas energías sociales. Para unos, Estados Unidos era el ejemplo a seguir; para otros, la mayor amenaza. La disputa de liberales y conservadores a lo largo del siglo XIX mexicano es, en buena medida, una querella por el significado de Estados Unidos. ¿Es el modelo que hemos de imitar o el agresor frente al que hemos de resguardarnos? Para O’Gorman la disyuntiva es esencial, no para la relación bilateral, sino para la conformación misma de la nacionalidad. Los liberales quisieron constituir la nación de acuerdo al modo de ser de Estados Unidos. Admiradores de sus leyes y de sus riquezas, estaban convencidos de que la adopción de sus reglas y sus prácticas nos traería prosperidad. Los conservadores, por su parte, se empeñaban en conservar lo heredado de España y veían la codicia del norte como el peor peligro para el alma mexicana. La nación debía preservar la pureza del ser tradicional y resistirse a las tentaciones de la imitación. Implícitamente, sin embargo, el proyecto conservador anhelaba también la prosperidad del norte. El siglo XIX enfrentó dos empresas irrealizables: imposible retornar al pasado, imposible convertirse en el otro. Incapaces de encontrar sus coincidencias, cada bando desconocía la necesidad de abrazar al otro. La exigencia de aprender del vecino pero no calcarlo, de vivir la tradición pero no congelarse en ella. http://www.reforma.com/blogs/silvaherzog/
@loscabareteros