Confesiones de un coach de sofá al que le falta sexo y le sobra ritmo

Siempre voy con Holanda y Alemania a muerte, en cualquier competencia decente… y, esta vez, en la Copa América iba con Uruguay porque Bielsa es el técnico. Lo amo. Es como mi padre postizo.

Eso sí, mi religión no es politeísta. Tengo un solo Dios: se llama Johan y se apellida Cruyff.

Como verán, perdí con mis afinidades y gustos.

Como un insigne libertino que fracasa el 30% de los intentos, hoy tuve que apretar el ceño, cerrar mi puño derecho y tragar saliva. Tal como también lo hace un buen y disciplinado priísta: tragar mierda sin hacer gestos.

En Europa, sin embargo, España mereció ganar. Fue la mejor selección!!! No hay discusión. Al ritmo y la posesión de balón ahora lo acompañaron de contundencia. La mejor selección sin cortapisas. Dany Olmo, jugó sublime!!!

En la copa América, Argentina, desde el 2022, me ha grangeado el apoyo. Tienen estirpe ganadora. Le sobran huevos diría mi abuelita Lala. Y eso me agrada. Son como Italia… si no los aniquilas cuando tienes oportunidad, a la primera opción te matan. La parsimonia y el ritmo dancístico de Di María por ambas bandas, la combatividad y furia de De Paul y el golazo de Lautaro disipan cualquier duda de quién es El Campeón.

Comentario aparte merece Colombia. La selección cafetalera jugó excepcional todo el torneo. No tengo empacho en reconocer que fue el mejor equipo… pero no supo aniquilar a Argentina. A la posesión de balón y al toque ritmico de la pelota le faltó el gol. Y un juego de futbol se gana con goles no con florituras. No les alcanzó, simplemente. James Rodríguez, jugadorazo, fue su caudillo -en su tercer aire-.

Satisfecho estoy, entónces, por el nivel de juego visto este verano.

De México… de México, después hablamos.

Leonardo Álvarez

@leon_alvarez

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