Jóvenes con menor nivel de escolaridad, los más afectados por el desempleo

Puede que las personas jóvenes resistieran más los efectos físicos de la covid-19, pero no lo que causó en materia laboral. Condiciones como una alta tasa de informalidad de hasta 68% les dejó más vulnerables ante los despidos. Y en momentos de recuperación, en los que incluso vamos dejando el cubrebocas, jóvenes con baja escolaridad todavía no pueden salir del desempleo.

Al cuarto trimestre de 2021, sólo las personas jóvenes “con estudios de preparatoria y universidad han logrado recuperarse, e incluso superar el nivel de empleo observado antes de la pandemia”, señala un reporte del Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco). Quienes cuentan con grado de bachillerato incrementaron casi 10% su tasa de empleo y los universitarios, cerca del 9 por ciento.

El informe Los jóvenes sin preparación son más vulnerables en el mercado laboral destaca los avances que ha tenido el país en la matriculación escolar y los beneficios económicos a largo plazo para quienes continúan estudiando.

“En 2019, 1.4 millones de jóvenes se graduaron del bachillerato, cifra 1.6 veces mayor que hace una década. De esos graduados, dos de cada tres iniciaron una licenciatura o una carrera técnica”. Pero “33% de la población en edad de estudiar una carrera decide no hacerlo y comienza a trabajar sin estudios superiores en un mercado laboral cada día más exigente y complicado”.

En vísperas de conmemorar el Día Internacional de los Trabajadores es necesario comunicar la importancia y beneficios de estudiar una carrera, concluir estudios superiores, “porque no sólo mejoras tu condiciones laborales, tus ingresos, también lograrás desarrollar mayores habilidades y la posibilidad de adquirir otras”, dice en entrevista Ana Gutiérrez, coordinadora de Comercio Exterior y Mercado Laboral del Imco.

El Economista