La Geopolítica y el Vaticano

Como en política no hay hechos inexplicables, la designación del cardenal estadounidense Robert Prevost como Papa León XIV, sucesor de Francisco, tendrá también una lectura geopolítica del papel que seguirá desarrollando el Vaticano en el juego internacional del poder de Estados Unidos. Es inevitable.

Dos hechos de geopolítica de alguna manera podrían decirse hoy que prefiguraron el voto del Cónclave:

La visita presurosa del vicepresidente estadunidense J. D. Vance al Vaticano apenas el pasado 20 de abril como enviado del presidente Trump, para una conversación especialmente simbólica con el Papa Francisco ya prácticamente desahuciado, y la fotografía oficial de la Casa Blanca de Donald Trump vestido –que no disfrazado– de Papa, junto a su declaración -que fue tomada a broma- de que quería ser Papa de la Iglesia católica.

La lista de los cinco principales papables había establecido también mensajes de lectura política: dos italianos, un filipino, un congolés y el estadounidense naturalizado peruano. La mayoría de los cardenales electores había sido designada por el Papa Francisco.

Prevost fue nombrado cardenal hace apenas un par de años, en 2023, lo cual puede entenderse hoy como un juego político del Papa Francisco preparando su propia sucesión.

Para subrayar: El Papa León XIV proviene del grupo religioso de San Agustín, un sacerdote que tuvo una vida licenciosa pero que se encontró con Jesucristo y decidió optar por el amor.

Leonardo Álvarez

@leon_alvarez