«Ya han pasado varios días desde que llegó a su fin la desangelada visita de AMLO a Washington. Los resultados consignados en la declaración conjunta emitida al finalizar la reunión no ofrecen muchas luces sobre lo que sigue. Los problemas centrales de la relación –migración, seguridad e incertidumbre sobre el cumplimiento de los compromisos establecidos en el TMEC– no tuvieron avances concretos. La declaración se limitó a dejar abierta la puerta para que se proceda a trabajar sobre ellos. ¿Qué tan lejos se podrá llegar?
El primer problema que merece un comentario es la migración. Múltiples circunstancias contribuyen a dificultar un avance positivo. En la reunión bilateral se evocó, como antecedente fundamental, la declaración sobre migración adoptada en la Cumbre de los Ángeles, reunión a la que no acudió AMLO. Se trata de un documento ambivalente en el que, por una parte, se da un paso adelante al mirar el fenómeno migratorio de manera integral para todo el hemisferio. Esto permite detectar los casos en que dicho fenómeno está encadenado, de tal suerte que lo que ocurre en la migración en Brasil, por ejemplo, afecta la pluralidad de los flujos migratorios que llegan a la frontera sur de México»: Olga Pellicer




