Steve Jobs, fundador de empresas como Apple, dejó muchos consejos que aún hoy son referencia para otros emprendedores y empresarios. El reconocido visionario solía tratar públicamente temas de interés en cuanto a gestión de equipos y uno de ellos es lo que él opinaba sobre las reuniones.
Ya sabíamos que Jobs, incluso llegó a echar de la sala a personas que habían sido convocadas por otros asistentes y que él consideraba que no tenían nada que hacer allí, según cuenta Ken Segall, exdirector creativo publicitario de Apple, en su libro ‘Increíblemente simple: La obsesión que ha llevado a Apple al éxito’.
En una carta que escrqibió Jobs, recogida en un libro que puedes visualizar y descargar gratuitamente, habla de las reuniones y la gestión de equipos y ahí destaca su frase de que «nuestra empresa se basa en el principio de que unas pocas personas buenas pueden producir un producto tremendo si no están encadenadas por tener que convencer a una organización mayor de lo que saben que es correcto».
También, «si pueden dedicar su tiempo personal a diseñar, comercializar o lo que sea, en lugar de dirigir a otros para que hagan estas tareas peor». La carta la mandó estando en la empresa NeXT Computer, Inc en 1986, que fundó cuando le echaron de Apple y que junto con Pixar se convirtió en el centro de su actividad.
Para ser fiel a este principio, Jobs recuerda que «todos necesitamos tiempo para el trabajo individual ininterrumpido. Las reuniones (proveedores, entrevistas…) nos roban tiempo individual, y la productividad de nuestros ingenieros se resiente».
Jobs pidió reservar todos los jueves como día sin reuniones de ningún tipo. «El jueves sería un día en el que metafóricamente se cierran las puertas al mundo exterior y trabajamos tranquilamente de forma individual».
Otro punto importante es «revisar a la baja nuestras necesidades de personal (y, por consiguiente, los presupuestos)». Dice Jobs que hay una línea muy sutil que, cuando se cruza al aumentar el número de empleados, hace que uno se convierta en gestor en lugar de colaborador o líder de equipo.
«Es mejor tener menos gente, aunque eso signifique hacer menos. Construyamos nuestra empresa despacio y con cuidado».
Hay que recordar que en el Índice global de la anatomía del trabajo de este año, Asana encuestó a 9.615 trabajadores a nivel global a finales de 2022 y afirmaba que las reuniones son el peor enemigo de la eficiancia.
Ya hemos visto otros estudios que indican que las reuniones pueden llegar a suponer una enorme pérdida de tiempo y cómo pueden agotar al trabajador, sobre todo cuando son por videollamada. Con el teletrabajo, la gente hace más esfuerzos por mantener reuniones para estar en contacto con el equipo.
Por otro lado, según un estudio de Otter, en un 70% de los casos, las reuniones impiden que los empleados completen todas sus tareas. Yendo más allá, pueden llegar a afectar de forma negativa a nuestro bienestar psicológico, físico y mental cuando son reuniones ineficaces. Otro problema es que desconcentran. Estás frente a tu PC haciendo tu labor concentrada o concentrado, te meten en una reunión y sales de ahí más disperso.
Genbeta