«Las elecciones del próximo año nos invitan a preguntarnos, una vez más, ¿cómo vota el electorado mexicano?
Las teorías del voto que la ciencia política ha puesto a nuestra disposición son múltiples y muy variadas, y nos sirven como brújula para saber a qué poner atención por medio de las encuestas.
La literatura sobre el voto estará de plácemes en 2024. La perspectiva sociológica del voto, desarrollada por Paul Lazarsfeld y sus colegas en la Universidad de Columbia, se inauguró con la publicación del libro The People’s Choice, en 1944, por lo que se cumplirán 80 años. Una década después, el equipo de Columbia publicó Voting, en 1954, otro motivo de celebración.
Una de sus ideas centrales es que el voto es un reflejo de las condiciones y características sociales de las y los votantes. Por ello solemos buscar en las encuestas la relación entre la preferencia electoral y variables como el sexo, la edad, la escolaridad, la clase social, la ocupación, el nivel de ingreso, la división urbana-rural, la región del país, la raza o etnia, e incluso la religión, entre otros rasgos sociales. Por su parte, las campañas suelen enfocarse a ciertos grupos demográficos para dirigir sus mensajes»: Alejandro Moreno.