El jefe del Comando Norte de Estados Unidos (Northcom) declaró que los cárteles en México y otras partes del hemisferio continúan “fomentando inestabilidad” y creando oportunidades para “adversarios estatales y no estatales” en la frontera sur de Estados Unidos.
El general Gregory Guillot, en testimonio ante el Comité de Servicios Armados de la cámara baja del Congreso, afirmó:“organizaciones criminales transnacionales en México y en otras partes del hemisferio occidental continúan fomentando inestabilidad y desafiando el imperio de ley, creando oportunidades potenciales para nuestros adversarios estatales y no estatales para ampliar su acceso e influencia a nuestras proximidades sureñas”.
Expresó preocupación porque “los cárteles también han demostrado una mayor disposición de enfrentar directamente a los militares mexicanos, fuerzas de seguridad y oficiales del gobierno en México”.
Añadió que la “migración irregular a través de México alcanzó niveles récord en el último año, y la violencia relacionada al narcotráfico ha escalado con cárteles rivales batallando por control de rutas de tráfico de droga y personas”.
En parte por esta amenazas, agregó, Estados Unidos está ampliando su relación militar a militar con México. “Contrarrestar la influencia de competidores en la región sigue siendo una prioridad clave para US Northcom y para nuestros socios miliares mexicanos, y como resultado directo, los miliares estadunidenses y mexicanos son más compatibles operacionalmente que en cualquier otro punto en nuestra historia compartida”, afirmó el general Guillot.
Citó en particular ejercicios militares conjuntos como Exercise Aztec Alligator (Ejercicio Lagarto Azteca) como evidencia de una “relación militar amplia, resiliente y enfocada” y muestra de asistencia entre socios para enfrentar “retos compartidos de seguridad”.
Para el general encargado de seguridad de América del Norte, uno de los éxitos más importantes es definir junto con México un enemigo común. Concluyó que los esfuerzos de Estados Unidos con México “simultáneamente han fortalecido nuestra seguridad mientras que han reducido la dependencia de México de equipo y contratos de Rusia y PRC [China] que frecuentemente vienen con condiciones”.
En la audiencia, Guillot y otros altos funcionarios militares estadunidenses abordaron las prioridades de seguridad para el hemisferio occidental y las “amenazas” a Estados Unidos, incluyendo actores estatales como Rusia y China, Corea del Norte e Irán como los no estatales incluyendo las organizaciones criminales.
La jefa del Comando Sur de Estados Unidos (US Southcom) encargada de seguridad del hemisferio occidental, general Laura Richardson, quien también testificó en la audiencia, afirmó que “la Estrategia de Seguridad Nacional de Estados Unidos reconoce el vínculo directo entre la prosperidad y seguridad de la región y la nuestra”.
Explicó que China busca sustituir a Estados Unidos como el principal poder económico y militar del mundo, pero aseguró que ella no permitirá eso y estará buscando promover la cooperación con “nuestros socios muy dispuestos” de las 28 democracias con las que trabaja en el hemisferio.
“Yo he aprendido que la presencia física importa. Si queremos ganar, tenemos que estar en el terreno”, subrayó la general Richardson.
La Jornada