El congreso y el gobierno de Estados Unidos han reforzado su cabildeo para que se modifique la reforma energética propuesta por el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Publicado este lunes, un análisis del Congreso estadounidense indica que las políticas energéticas de López Obrador “han preocupado” a los inversores en energía y a las empresas estadounidenses con gran parte de sus cadenas de suministro en México.
Las decisiones del gobierno de detener nuevas subastas en el sector de petróleo y gas, así como en proyectos de energía eólica y solar, sorprendieron a los inversionistas y “pusieron en el limbo a cientos de proyectos existentes”.
“Los actores del sector privado están presionando para que se realicen ajustes en la reforma eléctrica propuesta que permitan que México mantenga sus promesas del acuerdo climático de París y respete la inversión privada al mismo tiempo que fortalece la CFE”, refiere el documento.
Este martes, la subsecretaria de Comercio Exterior de la Secretaría de Economía, Luz María de la Mora, comenzó una visita de trabajo a Washington, del 22 al 25 de marzo.
La Subsecretaria sostendrá reuniones con actores de relevancia de Estados Unidos para discutir los principales temas de la agenda comercial entre México y Estados Unidos, como el agrícola, cadenas de suministro, además de dar seguimiento a los trabajos del Diálogo Económico de Alto Nivel (DEAN), por mencionar algunos.
“México es un aliado y socio ideal, y tiene el compromiso con la correcta implementación y funcionamiento del T-MEC”, dijo la Secretaría de Economía en un comunicado.
Antes, el pasado 14 de marzo, en una reunión privada con sus contrapartes de México y Canadá, Jayme White, representante comercial adjunto de Estados Unidos pidió “avances” en materia de empresas propiedad del Estado y el respecto a los inversionistas en el marco del T-MEC.
White se reunió en ese entonces con De la Mora, y el viceministro de Comercio Internacional de Canadá, David Morrison, en Washington, en un encuentro cerrado a la prensa.
Pero luego, a través de un comunicado de la Representación Comercial de Estados Unidos (USTR), White enfatizó la importancia de la colaboración en el Comité Ambiental del T-MEC; las discusiones en el Grupo de Trabajo sobre Cooperación en Biotecnología Agrícola para garantizar enfoques regulatorios basados en la ciencia y el riesgo en la agricultura, y la aprobación de productos biotecnológicos agrícolas.
“Y la necesidad de avances en el Comité de Empresas de Propiedad Estatal del T-MEC, incluso con respecto a políticas energéticas que promuevan la competencia y respeten los derechos de los inversionistas”, añadió.
El Economista