«La consulta popular del 1 de agosto inauguró una nueva era de democracia directa en nuestro país. Estuvo desangelada y con poca participación, pero no deja de ser el primer ejercicio en su tipo. El segundo probablemente atraerá más votantes a las urnas, y pienso que también generará una mayor polarización política: la consulta de revocación de mandato del presidente López Obrador, agendada para marzo de 2022.
La consulta de revocación de mandato no parece tener razón de ser, ya que el Presidente fue electo para un periodo sexenal, un periodo definido por la Constitución y que lleva cumpliéndose desde Lázaro Cárdenas (1934-1940) sin ninguna interrupción ni sobresalto. La consulta planteará a la ciudadanía si quiere que el Presidente continúe en su cargo o no, o alguna modalidad así, que implique continuidad o destitución»: Alejandro Moreno.